EscucharUn hombre de apellido Segura, de 31 años, falleció este viernes en el Hospital San Juan de Dios, donde estuvo internado durante tres meses tras ser rociado con gasolina y prendido fuego, presuntamente por su pareja sentimental.
Este caso empezó a desarrollarse el 21 de febrero anterior cuando, por razones desconocidas, la compañera de Segura intentó acabar con su vida. El hombre fue atendido primero en el Hospital Escalante Pradilla, en Pérez Zeledón y luego remitido al Calderón Guardia, donde murió, aparentemente debido a complicaciones derivadas de las quemaduras.
Agentes de la Unidad de Quemados del Organismo de Investigación Judicial se encargaron de levantar el cadáver. Además, los investigadores de la Policía Judicial de Pérez Zeledón enviarán un informe sobre el caso al Ministerio Público, que lleva adelante una causa por homicidio. Las autoridades no informaron si la sospechosa está detenida, ni proporcionaron su identificación.
Otros casos violentos
En el 2020, en Jacó de Garabito, provincia de Puntarenas, una mujer de 34 años fue detenida por ser la principal sospechosa de asfixiar y apuñalar a su pareja dentro del condominio en el que vivían.
Los hechos ocurrieron el 21 de octubre de 2019, cuando el estadounidense Jason Allan New, de 55 años, perdió la vida. La captura de la sospechosa ocurrió casi tres meses después, cuando la autopsia reveló que New había sido estrangulado y apuñalado.
En otro caso ocurrido en San Carlos, en 2016, el OIJ detuvo a una mujer de apellido Reyes, de 44 años, como sospechosa de haber asesinado a su pareja sentimental. La captura se realizó en San Juan de Ciudad Quesada.
Inicialmente, Reyes afirmó que el hombre se había suicidado en el asiento del carro en el que ambos estaban, pero la autopsia reveló que ella le habría disparado, aparentemente molesta porque horas antes lo había visto departir con la empleada de un local al que asistieron juntos. La víctima fue Randall Cortés Sequeira, de 35 años.
