El Tribunal Penal Especializado en Delincuencia Organizada (JEDO) lleva a cabo un juicio contra 25 personas acusadas de integrar una banda dedicada al narcotráfico, conocida como “Los Papis”, la cual operaba en Pérez Zeledón, San José y Buenos Aires de Puntarenas.
Según la Fiscalía, la organización delictiva se dedicaba a la posesión, almacenamiento, preparación, distribución y transporte de drogas. Además, realizaba cobros violentos de dinero y robaba estupefacientes a otros grupos involucrados en el narcotráfico.
LEA MÁS: ¿Cómo paga el crimen organizado sus ‘planillas’? Fiscal revela un nuevo negocio
De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), la operación generaba ingresos de aproximadamente ¢20 millones por semana, lo que se traduce en cerca de ¢1.040 millones al año.
Según el Poder Judicial, cada miembro del grupo desempeñaba un rol activo dentro de la organización. Se trata de 23 hombres y dos mujeres, identificados por las autoridades con los apellidos Salazar, Vargas, Zúñiga, González, Muñoz, Ulloa, Solís, Campos, Fonseca, Arguedas, Quirós, Jiménez, Cordero, Moya, Alfaro, Solís, Segura, Alvarado, Vargas, Salazar (mujer), Rojas, Arias, Espinoza (mujer), Amador y Berrocal.
La banda fue desarticulada en agosto de 2017, tras 34 allanamientos en viviendas, puntos de almacenamiento y lugares de distribución que culminaron con 28 personas aprehendidas.
Los operativos permitieron el decomiso de tres vehículos de alto valor, marihuana, cocaína, dinero en efectivo, una carabina, una escopeta, dos revólveres, así como armas de fabricación casera, municiones y AK-47.
LEA MÁS: Estas son las principales rutas de ingreso de droga a Costa Rica
Hermanos habrían encabezado la banda
La organización criminal, al parecer, era liderada por dos medio hermanos, identificados como Arce Chaves, de 41 años, y Chaves Rodríguez, de 30, quienes. Con la ayuda de su hermana, habrían reclutado en un lapso de dos años al resto de imputados.
En agosto de 2017, La Nación publicó que Chaves Rodríguez fue condenado a ocho años de cárcel por tráfico de drogas; sin embargo, salió bajo beneficio.
LEA MÁS: Le Monde alerta: Costa Rica se convierte en ruta clave del narco en Europa
Según el entonces director del OIJ, Wálter Espinoza, el grupo operaba en dos modalidades: mediante el método express, con representantes de ventas que distribuían droga directamente a los consumidores, y a través de búnkeres o en centros de distribución estáticos.
Además, en ese momento, las autoridades judiciales indicaron que la banda estaba vinculada a dos tentativas de homicidio y agresiones calificadas.
Las ganancias generadas por esta agrupación eran tan altas que requerían incluso asesoría financiera para legitimar el dinero.
