La zozobra por la desaparición de Betsabé Samari Martínez Krington, una adolescente con “discapacidad auditiva y de lenguaje”, por fin se acabó.
La quinceañera, de origen nicaragüense, había sido reportada como desaparecida desde el 2 de mayo pasado, cuando fue vista por última vez en San Josecito de San Isidro, en Heredia.
Sin embargo, este 7 de mayo, por la noche, las autoridades confirmaron su localización.
Al día siguiente, este jueves, el Patronato Nacional de la Infancia (PANI), precisó que desde el propio 2 de mayo, la Fuerza Pública había llevado a la adolescente al Departamento de Atención Inmediata de esa institución.
Allí fue atendida con un traductor de Lenguaje de Señas Costarricense (Lesco), pero ese acompañamiento no permitió descubrir su identidad. Sin embargo, días después, gracias a la coordinación con el OIJ se cotejó que se trataba de Betsabé, la adolescente reportada por sus familiares.
Por razones que se desconocen, la menor quedó bajo protección especial del PANI.
El caso de Betsabé trascendió este miércoles, cuando se informó que la muchacha había viajado desde Nicaragua para visitar a unos familiares. No obstante, salió de una casa y no se supo más de ella.
