Moda: más que una propuesta estética, un poderoso mensaje sobre nuestros cuerpos

La moda se ha convertido en una plataforma para enviar mensajes poderosos. En esta ocasión la marca Tommy Hilfiger se alió con diversos activistas. El objetivo es amplificar la voz.

Una de esas voces es la británica Jameela Jamil, una artista versátil única en su tipo que trabaja como actriz, escritora, presentadora y defensora. Jameela apareció por primera vez en la televisión estadounidense interpretando a Tahani en la serie nominada al Globo de Oro, The Good Place.

Se ha destacado por ser una defensora de la “neutralidad corporal”, un concepto que se enfoca en el para qué sirve el cuerpo y no en cómo luce.

“Mi definición de neutralidad corporal es simplemente elegir ni siquiera ocuparme de mi cuerpo. No quiero mirarme en espejos de cuerpo entero. No quiero usar ropa muy ajustada todo el tiempo. Yo simplemente no quiero pensar en ello. Quiero pensar en mí misma como un cerebro flotante”, describe la activista.

Es la idea de que podemos seguir con nuestros días y existir sin pensar mucho en el cuerpo de una forma u otra, positiva o negativa; es la idea de que simplemente podemos vivir y ser dignas de respeto sin pensar en nuestro cuerpo en absoluto.

La práctica de la neutralidad corporal trata al cuerpo como una máquina que nos permite seguir con nuestras actividades y tener todas las experiencias sin poner ninguna presión o atención adicional sobre su apariencia.

Para ella, dejar de preocuparse por la imagen física ha sido sinónimo de bienestar “Desde que adopté la neutralidad corporal, ya no paso controlando mi peso, ni me involucro con este tema profundamente perturbador para mí. Me he vuelto más exitosa. Tengo mejores amistades, más profundas y significativas. Soy una mejor novia. Estoy mejor en mi trabajo. Ahora tengo energía. Me siento agradecida por lo que tengo, porque dejé de sentirme enojada con mi cuerpo”, relata.

En el 2018 Jameela lanzó una plataforma de movimiento llamada I Weigh. Lo que comenzó como una idea y una página de Instagram se convirtió en una comunidad de agentes de cambio que se unen para compartir ideas y experiencias.

A través de contenido original, editorial y podcasts, la plataforma explora los problemas sociales como la salud mental, el cambio climático y la representación de grupos marginados.