En un mundo donde el cuidado de la piel se convierte en prioridad para muchas mujeres, surgen marcas que no solo buscan ofrecer productos, sino también soluciones a necesidades reales. Tal es el caso de Kokoa, una empresa creada por Suhey Vilá, una joven emprendedora que, con esfuerzo y capacitación, logró transformar su pasión en un negocio próspero. Desde sus inicios en 2020, Kokoa ha destacado por combinar ingredientes naturales con la ciencia detrás de la formulación cosmética, abriendo paso a una marca que responde a las necesidades de diferentes tipos de piel. Esta es la inspiradora historia de Suhey, una mujer que supo convertir sus conocimientos y amor por la belleza en un emprendimiento sólido.
El origen de un sueño
Suhey creció rodeada del espíritu emprendedor de su madre, quien también lideró su propio negocio. Inspirada por ese ejemplo y motivada por su interés en el cuidado personal, Suhey comenzó a experimentar con la elaboración de productos para su piel en 2020. Aquejada por alergias que le dificultaban encontrar productos adecuados en el mercado, decidió elaborar sus propias soluciones, aprovechando sus estudios en microbiología. “Al principio solo hacía productos para mí, pero cuando mis amigas comenzaron a pedírmelos, me di cuenta del potencial que tenía para emprender”, comenta Suhey.
Lo que inició como un proyecto artesanal pronto se convirtió en una empresa formal. Desde el principio, Kokoa apostó por el uso de ingredientes naturales como el té verde, la centella asiática, el árbol de té y el aloe vera, integrándolos con activos cosméticos que ofrecen resultados visibles. En palabras de Suhey, “buscamos ingredientes que no solo sean naturales, sino que realmente funcionen, adaptando cada fórmula a las necesidades específicas de la piel”.
De la cocina al laboratorio: el crecimiento de Kokoa
El camino no fue fácil. Suhey compaginaba su trabajo en un laboratorio con el desarrollo de su marca, dedicando noches enteras a preparar pedidos. Sin embargo, llegó un momento en el que tuvo que tomar una decisión. “No podía seguir con las dos cosas. Decidí arriesgarme y dedicarme por completo a Kokoa, y hasta ahora no me arrepiento”, asegura.
En 2021, Suhey dio un paso importante al reformular su marca, pasando de una presentación más artesanal a un branding profesional que reflejara la calidad de sus productos. Este cambio incluyó la eliminación y mejora de ciertos productos, además del lanzamiento de nuevas líneas para piel grasa, mixta e hidratación general, así como productos específicos para problemas como el acné y las manchas. En octubre de 2023, lanzó serums con activos reconocidos como el retinol, la niacinamida y el ácido glicólico.
Actualmente, la marca cuenta con 25 productos en su catálogo, todos desarrollados con ingredientes cuidadosamente seleccionados y respaldados por estudios. La base de sus formulaciones, además de ser efectiva, está orientada a cubrir necesidades específicas que muchas veces no son atendidas por otros productos en el mercado.
Aunque al inicio Suhey manejaba todo el negocio por su cuenta, hoy cuenta con un equipo que la respalda en áreas clave como la creación de contenido, esencial para conectar con su comunidad en redes sociales.
Proyección a futuro
A largo plazo, Suhey visualiza su marca como un referente en el mercado del cuidado de la piel, con productos que no solo respeten la piel, sino también el medio ambiente. Además, planea ampliar su catálogo y posicionarse en mercados internacionales con el sello verde de Costa Rica.
La historia de Suhey Vilá y Kokoa demuestra que el emprendimiento no es solo cuestión de oportunidades, sino de pasión, esfuerzo y aprendizaje constante. Desde sus humildes inicios hasta convertirse en una marca reconocida, Kokoa refleja el poder transformador de un sueño que se trabaja con dedicación. Suhey no solo ha creado una empresa, sino también un legado que inspira a otras mujeres a seguir sus propios caminos en el mundo empresarial.
El poder de la naturaleza en cada frasco
El secreto detrás del éxito de esta marca radica en la pureza y calidad de los ingredientes que utiliza. Cada producto está formulado con componentes como aloe vera, aceites esenciales de plantas autóctonas y extractos frutales que no solo hidratan y nutren, sino que también revitalizan la piel de manera natural.
La filosofía detrás de sus líneas de productos es simple pero poderosa: si proviene de la naturaleza, es mejor. Al evitar químicos agresivos como parabenos y sulfatos, logran crear fórmulas aptas incluso para las pieles más sensibles. Este enfoque no solo beneficia a quienes usan sus productos, sino que también reduce la huella ambiental de su fabricación.
Además de su enfoque en ingredientes naturales, esta marca costarricense está comprometida con prácticas sostenibles. Sus envases son elaborados con materiales reciclables y, en algunos casos, incluso compostables. Asimismo, trabajan con productores locales para asegurar que los ingredientes sean obtenidos de manera ética y sostenible, promoviendo la economía circular y reduciendo el impacto ambiental.
Aunque su calidad y su compromiso ambiental podrían ubicarla en el segmento de lujo, uno de los objetivos de esta marca es que el cuidado de la piel esté al alcance de todos. Con precios accesibles y una amplia variedad de productos, buscan democratizar el acceso a opciones de skincare naturales y efectivas, sin que esto implique un sacrificio en el bolsillo. De esta manera, demuestran que la sostenibilidad y el bienestar no tienen por qué ser privilegios, sino derechos para todas las personas.