
Pese a negar los cargos y objetar el informe del comisionado de la Unafut, el Tribunal Disciplinario de la Fedefútbol decidió sancionar al técnico del Herediano, Jafet Soto Molina.
En el comunicado de la Fedefútbol se informó que el Comité Disciplinario determinó “sancionar al director técnico Jafet Soto Molina con tres partidos de suspensión y una multa de doscientos mil colones (₡200,000).
“Esto, en conformidad con lo establecido en el artículo 38, inciso 1), al ser la primera ocasión en que realiza gestos de provocación a los aficionados, según lo reportado por el comisario del encuentro.
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“Este tribunal recuerda que los informes de los oficiales de partido gozan de presunción de veracidad y constituyen prueba suficiente para la imposición de sanciones, salvo prueba en contrario debidamente acreditada.
“En consecuencia, no corresponde a este órgano sustituir la valoración efectuada por el oficial en el ejercicio de sus funciones ni reexaminar los hechos reportados desde un punto de vista subjetivo”.
De acuerdo con el informe arbitral del réferi Benjamín Pineda, el comisionado de la Unafut, Alex Vargas, indicó que Soto Molina salió del terreno de juego con las manos levantadas señalando el número 31, en alusión al último cetro ganado por el Team a Alajuelense, tras finalizar el partido que los rojiamarillos ganaron 0-1, en clara incitación a los aficionados manudos.
Al conocerse los hechos, el Club Sport Herediano refutó este lunes 11 de agosto la acusación, señalando que el estratega celebró legítimamente la victoria obtenida, sin siquiera dirigir la mirada hacia la gradería rival.
“Su gesto, ampliamente registrado por medios y testigos, consistió únicamente en indicar con su mano el número 31, en referencia a los títulos nacionales obtenidos por el Club Sport Herediano a lo largo de su historia”, indicó el club en un boletín.
Jafet Soto se defiende y el caso de Marcel
Por su parte, Jafet Soto, en horas de la mañana, fue enfático en defenderse y asegurar que no había hecho nada malo.
“Estoy muy sorprendido, porque he sido respetuoso de aguantar hasta que me apaguen la luz, que me enciendan los aspersores o que se meta la seguridad a sacar a nuestros jugadores, quienes estaban dando la vuelta olímpica a oscuras”, declaró Jafet en Teletica Radio, en clara alusión al último cetro que festejaron en el Estadio Alejandro Morera Soto.
Jafet comentó que el domingo, al terminar el encuentro, nunca incitó ni trató de ofender a los aficionados manudos.
“Le dije a los jugadores que, si ganábamos, me iba a echar un bailecito, y me vieron hacerlo; a ellos se lo prometí. Iba saliendo y pegué un grito al cielo, e hice la señal del 31… lo hice mal, debí hacerla al revés. Pero lo hice para mí, porque no volteo a ver a nadie, estoy lejos de la gradería y, de hecho, el cuarto árbitro pasa a la par mía. Siempre pego un grito al cielo como desahogo”, concluyó Soto.
En el caso de Marcel Hernández, quien al celebrar su gol se llevó su mano izquierda al oído, al minuto 42 El Tribunal acuerda tomar nota de lo reportado por el Comisario de UNAFUT, no obstante, se constata que el árbitro del encuentro apreció la acción y procedió a sancionar al jugador Hernández Campanioni con una tarjeta amarilla.
“Por tanto, en virtud de que la acción fue sancionada con amonestación por el árbitro, este Tribunal únicamente procederá a registrar dicha tarjeta amarilla en la contabilidad oficial de amonestaciones”, explicó el Tribunal.