
En apenas 36 días, un exdelantero del Deportivo Saprissa pasó del cielo al infierno, al ser contratado, despedido y nuevamente contratado en el fútbol de Guatemala.
De forma sorpresiva, el Deportivo Chiquimulilla, del municipio de Santa Rosa, equipo de la Primera A o segunda división del fútbol guatemalteco, anunció el 23 de junio, a través de sus redes sociales, que había dado de baja al ariete tico con un contundente mensaje: “Somos un club serio y no toleramos a personas indisciplinadas con el alcohol”.
Fue así como los Canaleros informaron que el delantero Frank Zamora García quedaba fuera de la institución, luego de haber sido contratado el pasado 4 de junio.

Sin embargo, la vida le dio otra oportunidad al delantero puntarenense, quien ahora es nuevo jugador del Chimaltenango FC, según anunció el propio club en su página oficial.
“El de Puntarenas se suma a los Cisnes Blancos. El delantero Frank Zamora García ‘Zamagol’ es nuevo jugador del Chimaltenango FC para el Torneo Apertura 2024 de la Liga Primera División”.
El periodista guatemalteco Hugo Siliézar comentó que el Chimaltenango FC es un equipo que, en los últimos años, ha militado en la primera y tercera división del fútbol chapín, intentando ascender a la Liga Mayor, aunque sin éxito.
El club se ubica en el departamento de Chimaltenango, una zona industrial situada a 54 kilómetros de Ciudad de Guatemala.
Zamora, de 33 años, ha jugado en Guatemala para Universidad y Zacapa en la Primera A, y para el Cobán Imperial en la denominada Liga Mayor.
Frank Zamora inició su carrera con el Puntarenas FC en 2012, de donde pasó al extinto equipo Generación Saprissa, en la Liga de Ascenso.
También formó parte de las escuadras de Carmelita, Municipal Grecia, Pérez Zeledón, nuevamente Municipal Grecia y Guadalupe, desde donde dio el salto al Deportivo Saprissa en 2020.
Sin embargo, con los tibaseños tuvo una campaña irregular. El 3 de octubre de 2020 circuló en redes sociales un video en el que se observa a Zamora en una reunión con otras personas y en presencia de bebidas alcohólicas, lo que llevó al club a abrirle un proceso disciplinario.
Días después, fue separado del plantel morado, a pesar de que el jugador ofreció una disculpa pública en sus redes sociales tras conocerse el incidente.