
De niño, su pasión era la música, y era común verlo en las calles liberianas al frente de la Cimarrona Marchena, fundada por su abuelo Julio César Marchena (q. d. D. g.), tocando con orgullo el redoblante e intentando seguir el ritmo de las melodías.
Aquel chiquillo del barrio El Invu de Liberia, que pasaba horas bajo el ardiente sol combinando la música con el fútbol, necesitó apenas 120 segundos en la Primera División para quedar en la historia del Municipal Liberia, actual líder del Torneo Apertura 2025.
Paul González Marchena, quien debutó este sábado en la máxima categoría del fútbol costarricense, se convirtió en el futbolista más joven del cuadro pampero en anotar en un partido oficial de la Primera División.
El juvenil artillero ingresó al minuto 89 en el duelo ante Puntarenas FC, este sábado 23 de agosto, en el estadio Miguel Lito Pérez de Puntarenas, y al 90+1 anotó el 0-3 definitivo tras una acción individual, luego de un servicio del argentino Malcom Pilone.
De acuerdo con las estadísticas del periodista Felipe Castillo, Paul anotó a los 16 años, dos meses y 15 días, superando a Yacsy Jarquín, quien lo hizo con 17 años, cinco meses y 28 días, el 19 de noviembre del 2017 ante el Deportivo Saprissa.
El joven pampero, tras la jugada individual que terminó en la anotación, corrió sin rumbo por el terreno de juego con el rostro desbordante de alegría, mientras sus compañeros corrían a abrazarlo.
“La verdad me siento muy contento. Es algo que siempre soñé. Es una sensación inexplicable. Cuando hice el gol no me lo podía creer. Cuando vi que la bola estaba adentro no sabía qué hacer ni hacia dónde correr. Solo estaba muy feliz, muy alegre. Me sentía como ese niño que jugaba en la calle todo el día. Demasiado feliz”, comentó González mediante un video proporcionado por el Municipal Liberia.
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Paul González y sus consejeros
Con la cabeza rapada, tras haber debutado el pasado miércoles 20 de agosto con los liberianos en el Torneo de Copa —en la victoria 6-2 ante Cóbano—, Paul no podía ocultar su alegría ni tampoco su pasado musical.
“Lo de la música es una tradición en la familia. La cimarrona la fundó mi abuelo, quien ya falleció. Siempre andaba detrás de él tocando el redoblante en diferentes actividades, porque me gustaba demasiado. Pero después llegó el fútbol y la verdad pasaba jugando en la calle todo el tiempo, hasta que llegué a las ligas menores de Liberia”, añadió González.
El joven ariete de la “Ciudad Blanca” actualmente cursa décimo año en el Colegio Católico de Santa Ana de Liberia, por lo que debe combinar los entrenamientos con los estudios.
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“Por dicha, los profesores me ayudan muchísimo en la parte académica. No es fácil, porque mis padres siempre me inculcan que estudie. También mis compañeros me ayudan con las materias, me piden que les regale entradas para ir a ver los partidos; siempre están atentos”, manifestó González.
Paul es consciente del apoyo que le brindó el profesor José Saturnino Cardozo, así como los consejos del paraguayo Fernando Lesme y del uruguayo Fabrizio Ronchetti, asistente técnico del plantel liberiano, y la gran motivación de su familia.
“Estoy muy agradecido con las personas que me han ayudado. Lesme y Ronchetti siempre me aconsejan, están encima de mí para que no me relaje, para que dé siempre lo mejor de mí, y están allí animándome en todo momento”, declaró González.