
Alonso Martínez recibió en su primera aparición como jugador de Miguel Herrera en la Selección de Costa Rica la confianza para ser titular y convertirse en el socio de Manfred Ugalde, el ‘9′ referencia del conjunto patrio.
La figura del New York City de la MLS fue el designado por el cuerpo técnico para ser el atacante escurridizo, el ofensivo que más se aleja del área para crear ocasiones y también el que debe hacer el mayor sacrificio para abrir espacios. De hecho, Alonso tiene la libertad de flotar por todo el frente de ataque.
Alonso aporta velocidad, potencia y dinámica, mientras Ugalde tiene ubicación, buen juego aéreo y lo más importante, es un goleador.
Con una anotación y dos asistencias, Alonso Martínez logró destacar en la Tricolor, sobre todo porque no paró de correr, entregarse y hasta colaborar en la fase defensiva como uno más.
“Eso era lo que quería el profesor (Miguel Herrera). Debíamos ganar y, sobre todo, se hizo énfasis en la contundencia frente al marco y me parece que lo logramos”, describió Martínez.
De hecho, durante los 90 minutos, no tiene tantas opciones como en su club, sobre todo porque él sabe que debe ser quien haga el mayor desgaste.
Ante Belice, fue normal ver al atacante hacer diagonales hacia las bandas, también picar a los espacios para ganar línea de fondo y habilitar.
“Siento que la intención ya sabemos cuál es. Ahora vamos con más toque del balón y más intensidad hacia el marco rival”, explicó.
Alonso, en la vuelta, logró un gol que se metió en el ángulo derecho del arco rival.
“El mío fue golazo... Bran la pega muy bien. Son buenos goles y Manfred no sabía que brincaba tanto”, bromeó Alonso sobre las dianas de Costa Rica en el Estadio Nacional.
El jugador se refiere a un tanto de cabeza de Manfred y dos remates de larga distancia que hizo Alejandro Bran, volante de Alajuelense.
La Selección de Costa Rica ahora disfruta de una pareja en ofensiva, Alonso Martínez y Manfred Ugalde, quienes, conforme pasan los minutos, se notan más compenetrados.