
Bayron Mora, arquero de Alajuelense, fue el héroe inesperado de la final de la Copa Centroamericana, en la que los manudos consiguieron su tricampeonato del área, pues detuvo dos penales en la tanda definitiva.
Cuando Guillermo Villalobos remató el quinto penal, Bayron Mora no supo cómo reaccionar, solamente volvió a ver al cielo, lloró como un niño y se desplomó en el césped del estadio Cementos Progreso.
El arquero no escondió su satisfacción por su rendimiento, pero también por el mensaje que mandó Alajuelense al dejarse el trofeo.
“Mandamos un mensaje de autoridad, hicimos un gran torneo. Supimos salir de la adversidad cuando la enfrentamos”, declaró Mora.
El arquero, que fue considerado el Mejor Jugador de la Final, también rescató que aunque hace un mes a él nadie lo valoraba como estelar, siempre confió que tendría una oportunidad de atajar con los manudos.

“Esto es un gran momento, estoy contento. Este fue un gran partido y salimos campeones” contó.
Por último, el futbolista añadió que estuvo listo para tomar el chance que le dio Óscar Ramírez.
“Sinceramente siempre tengo algo muy claro, Dios sabe cuando es el momento justo y él me tiene acá cuando menos uno lo espera”, finalizó.
Mora tomó la portería rojinegra tras la lesión del titular Washington Ortega, quien sufrió una lesión muscular. Le correspondió atajar en los dos partidos de la serie final ante Xelajú y, además de los dos penales detenidos, protagonizó otras acciones determinantes que demostraron seguridad bajo el arco.
