Los pasados 3 y 4 de junio, Costa Rica presidió la Reunión Ministerial del Consejo (MCM, por sus siglas en inglés) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en París. Se trató de un hito no solo diplomático sino estratégico para nuestro país, pues lideró el encuentro anual más importante de esta organización que reúne a las economías más avanzadas del planeta.
Con un número récord de ministros y delegaciones de países miembros e invitados, la MCM 2025 confirmó la centralidad de la OCDE como espacio de diálogo global y reafirmó la vigencia de los valores que compartimos: democracia, economías abiertas, cooperación internacional, desarrollo sostenible y búsqueda de soluciones basadas en evidencia.
Presidir esta reunión no fue un logro casual. Fue la culminación de un proceso que ha trascendido gobiernos y ciclos políticos, consolidando una política de Estado alrededor de nuestra participación en la OCDE. Desde nuestra adhesión, en 2021, Costa Rica ha asumido este espacio con convicción, como plataforma para impulsar reformas internas, amplificar nuestra voz a nivel internacional y contribuir con soluciones concretas a los desafíos globales.
Ese mismo espíritu inspiró los resultados alcanzados bajo nuestra presidencia de la MCM. Uno de los principales entregables fue la adopción del nuevo Marco Estratégico para América Latina y el Caribe, una iniciativa impulsada por Costa Rica que profundiza la cooperación técnica y política con la región, fortaleciendo la relevancia de la OCDE más allá de sus miembros tradicionales.
Además, nuestro país lideró propuestas en áreas clave para el desarrollo económico y la transformación digital: cadenas de suministro resilientes, inteligencia artificial centrada en el ser humano, protección de datos y atracción de inversión responsable. Son temas que no solo reflejan nuestras prioridades internas, sino que posicionan a Costa Rica como un actor con propuestas y soluciones en debates de escala global.
Nuestro compromiso se extendió también a regiones estratégicas. La MCM reafirmó el apoyo a Ucrania frente a la agresión rusa y subrayó la importancia del Indo-Pacífico como motor del crecimiento mundial. En ese marco, Costa Rica expresó su aspiración de integrarse al Acuerdo Progresista e Integral de Asociación Transpacífico (CPTPP), como parte de una estrategia de inserción internacional que diversifique mercados y profundice alianzas.
La Reunión Ministerial de la OCDE también brindó a Costa Rica una valiosa oportunidad para promover el Acuerdo sobre Cambio Climático, Comercio y Sostenibilidad (ACCTS), una iniciativa pionera impulsada por nuestro país junto a otros socios afines. En el marco del MCM, Costa Rica reiteró su compromiso con este acuerdo innovador y avanzó en sus esfuerzos por ampliar su alcance, fomentando el interés de nuevos países en sumarse a esta alianza que vincula disciplinas de comercio con objetivos de acción climática.
Todo esto fue posible gracias a un liderazgo articulado que merece ser reconocido. Felicitamos al ministro de Comex, Manuel Tovar; a la ministra del Micitt, Paula Bogantes; al ministro del Minae, Franz Tattenbach, y a sus equipos técnicos, por encabezar esta agenda con visión y determinación en iniciativas clave de sus respectivas áreas de competencia. Asimismo, hay que destacar el trabajo fundamental del embajador Elías Soley y de toda la Delegación Permanente ante la OCDE en París para orquestar este proceso, gestionar consensos y proyectar a Costa Rica con credibilidad y coherencia ante los países miembros y la Secretaría de la OCDE.
Presidir la MCM 2025 ha sido una oportunidad invaluable para reafirmar el lugar de Costa Rica en el mundo, su compromiso con el multilateralismo y su capacidad de contribuir activamente en la construcción de soluciones globales. Que este hito nos inspire a seguir haciendo las cosas bien en la OCDE, a participar con energía en sus comités y grupos de trabajo, y a mantener viva la vocación reformista que nos llevó hasta aquí.
Porque más que un punto de llegada, este liderazgo debe ser un punto de partida para que la OCDE siga siendo una herramienta al servicio del desarrollo, de la diplomacia, de las políticas públicas y del bienestar de los costarricenses.
Tomás Dueñas es exministro de Comercio Exterior y exembajador de Costa Rica en Washington y ante la Unión Europea.
