
Con sus boletos de viaje en mano, Carlos Manuel Cartín y su esposa, Geannina Feoli, llegaron desde las 10 a.m. al aeropuerto de Quito, en Ecuador, para regresar a Costa Rica el sábado 18 de mayo.
Sin embargo, cuando se presentaron al mostrador de Avianca, recibieron la noticia de que la ruta del vuelo de Lacsa hacia el aeropuerto Juan Santamaría había sido suspendida de forma indefinida.
Por eso permanecieron siete horas atrapados en el aeropuerto de Quito, a la espera de una solución que nunca llegó. Cartín dijo que aunque la aerolínea tenía el nombre del hotel en el que estaban hospedados, así como sus correos electrónicos, no fueron notificados.
En Costa Rica, la Dirección General de Aviación Civil tampoco tuvo conocimiento de los cambios de Avianca con antelación.
De acuerdo con el subdirector de Aviación Civil, Álvaro Vargas, la decisión de Avianca no fue comunicada oportunamente, ya que la notificación oficial se emitió de manera simultánea a la eliminación de los vuelos.
Incertidumbre. Durante siete horas, el matrimonio costarricense permaneció sin respuesta a la pregunta de cómo harían para regresar a Costa Rica. Cartín se quejó del trato recibido.
“El supervisor de la aerolínea, Francisco Vallejo, nos dijo que no podía a hacer nada; que eso era un problema nuestro”, manifestó el pasajero costarricense.
Durante el tiempo de espera, no hubo respuestas concretas a sus peticiones de información. Al ser las 3:30 p. m., les dijeron que lo único que podían hacer era regresar en la madrugada del día siguiente.
“Fue una situación indignante e inhumana. Nos dijeron que teníamos que volver a las 3:30 de la mañana del domingo. Les dije que eso no era posible, pues la ciudad está a más de una hora de camino.
”No tenía hotel reservado y no sentía seguridad para tomar un taxi”, narró este empresario.
Ante la desesperación de no saber cómo salir de Ecuador hacia Costa Rica, Cartín tuvo que acudir a otra aerolínea en el aeropuerto para comprar nuevos tiquetes a un costo de $738, cada uno (unos ¢371.000 por boleto aéreo).
La directora de Comunicación de Avianca, Claudia Arenas, expresó que la compañía procederá al reembolso total del monto invertido por este pasajero.
“Avianca lamenta mucho los inconvenientes y está procediendo al reembolso total del monto invertido por este pasajero en los boletos comprados”, indicó.
Sin embargo, el empresario mostró un correo electrónico, con fecha del miércoles pasado, en el que Ingrid Recinos, funcionaria de Servicio al Cliente de la empresa Avianca, le indica que el caso entrará a investigación y el reembolso sigue pendiente.
“Hasta el momento no hay soluciones. Queremos que se explique al país lo que está ocurriendo y qué nos espera”, dijo el afectado.
Cartín envió, el 22 de mayo, una carta formal en la que solicita el reintegro del gasto, así como una explicación pública del gerente general de Lacsa, Mario Zamora, y de la gerente de Accionistas, Norma Naranjo. Sin embargo, a la fecha no ha recibido respuesta.
“¿Qué hubiera sido de nosotros si no tuviésemos los recursos para comprar los boletos a la otra aerolínea? ¿Por qué Avianca hizo todo esto sin considerar la Ley de Aviación Civil de Costa Rica?”, cuestionó el empresario Cartín.
Aviación Civil aún tiene pendiente el anuncio de cuáles serán las sanciones que deberá asumir la compañía aérea por no haber notificado de previo. Los departamentos Legal y de Transporte Aéreo presentaron un informe al Consejo Técnico de Aviación, que deberá dar un criterio los próximos días .