El presidente de la República, Rodrigo Chaves Robles, dijo la tarde de este miércoles que tenía “listo” un plan, de mutuo acuerdo con la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), sobre el futuro de la polémica subasta de frecuencias de radio y TV abierta. Sin embargo, se abstuvo de revelar de qué se trataba.
Así lo dijo en su tradicional conferencia de prensa semanal, en Casa Presidencial, poco después de que el magistrado Paul Rueda, de la Sala Constitucional, ordenara, como medida cautelar, la suspensión inmediata de esa subasta, mientras se estudia un recurso de amparo que cuestiona la licitación.
“Yo tenía el anuncio hoy (miércoles para el lector) de cuáles son los siguientes pasos, pero la Sala IV se me trató de adelantar (…). Entonces, no le voy a decir qué es lo que íbamos a hacer nosotros con Sutel, porque si lo digo, lo matan antes de nacer”, declaró el mandatario.
Agregó que su equipo trabajó “todo el fin de semana y el lunes y martes” en definir esos pasos, que —según él— serían “satisfactorios para todos los costarricenses, excepto para quienes han ordeñado y sangrado a la vaca del pueblo”.
No detalló si se trataba de ajustes al proceso, de una nueva ruta de adjudicación, o bien, de medidas regulatorias adicionales.
El magistrado Paul Rueda, en calidad de magistrado instructor del caso, encontró “indicios plausibles” de que permitir la continuación de la subasta provocaría “daños severos” por una disminución significativa en la prestación de los servicios radiofónicos y televisivos en el país.
Según la resolución de medida cautelar, la baja participación en la subasta pone en riesgo la continuidad y diversidad de la oferta actual.
Justo esta semana, Sutel confirmó que solo 24 concesionarios de televisión y 74 de radio —25 en AM y 49 en FM—, acudieron como oferentes al concurso. Cifra que es considerablemente menor frente a los 98 potenciales concesionarios actuales.
Esto generaría el riesgo de que la cantidad final de prestadores se reduzca a menos de dos tercios de la oferta vigente, de acuerdo con la argumentación de Rueda.
Mecanismo legítimo y obligatorio
En su mensaje sobre este tema, Chaves defendió el principio de la subasta. Alegó que era un mecanismo legítimo y obligatorio para adjudicar frecuencias, pero evitó referirse a los detalles técnicos del procedimiento ejecutado por la Superintendencia.
Sí criticó la renovación automática de concesiones por décadas, pero no valoró la metodología de precios mínimos, los montos estipulados, ni la planificación del estudio de mercado de Sutel, el cual es cuestionado en el recurso de amparo.
Lo que sí hizo fue lanzar críticas a propietarios de medios de comunicación y a figuras políticas que, según él, se oponen al modelo de subasta.
Calificó de “hipocresías” las objeciones sectoriales y afirmó que la Sala Constitucional “se adelantó” para bloquear la estrategia del Poder Ejecutivo.
La suspensión mantiene en pausa un proceso que Sutel había convocado para adjudicar frecuencias de radio AM y FM, y televisión abierta, y que forma parte de un plan de reordenamiento del espectro anunciado por el Gobierno.
¿Cómo calculó la Sutel los montos?
Para calcular los precios base de la subasta, la Sutel definió el valor del espectro radioeléctrico según su uso y el mercado. Elaboró un modelo de valor unitario con base en el ancho de banda, la población que sería atendida en cada zona de Costa Rica y el período de cada concesión (15 años).
Estimó el valor económico total asignado al espectro para, luego, diferenciarlo entre bandas de televisión y radio.
Por ejemplo, en el caso de televisión, el precio promedio de una concesión de una frecuencia abierta para cobertura nacional fue de $2.810.691, el equivalente al 12,19% de todo el valor asignado al espectro para televisión, que es de $23 millones.
Sin embargo, la Sutel dejó el precio base de participación en el concurso más bajo: $1,6 millones, con el objetivo de interesar a más oferentes.
Los segmentos de frecuencia para radio comprenden las bandas de 525 kHz a 1705 kHz (AM), 88 MHz a 108 MHz (FM). Para televisión, los segmentos del espectro entre 174 MHz y 216 MHz y de 470 MHz a 608 MHz.
La Superintendencia consultó información a diferentes reguladores e instituciones gubernamentales de diferentes países como Estados Unidos, España, Honduras, México, Perú, Colombia, entre otros.
