
El presupuesto del Gobierno Central para transferir dinero a otras instituciones creció casi un 5% en los primeros cinco meses del año, con respecto al presupuesto inicial del 2021.
El incremento se destinará, principalmente, a pagar la deuda del Estado con la CCSS y a comprar vacunas, además de financiar pensiones para personas de escasos recursos, albergues del PANI y obras de MOPT.
Las transferencias son giros para cubrir los gastos de otras entidades públicas, órganos desconcentrados de ministerios, fundaciones o asociaciones de desarrollo.
Para mayo, el presupuesto para este rubro había crecido en ¢143.000 millones gracias a nuevos montos aprobados por los diputados en presupuestos extraordinarios, así como a revalidaciones de saldos de créditos externos.
El monto total subió a ¢3,2 billones (millones de millones), señaló la Contraloría General de la República (CGR) en un informe de monitoreo del gasto.
La cifra podría podría subir más si los legisladores aprueban nuevos presupuestos extraordinarios en discusión, que aportarían otros ¢46.000 millones a las transferencias, señaló la CGR.
Sobre el aumento en las transferencias, el ministro de Hacienda, Elian Villegas, explicó que este año fue necesario incorporar más presupuesto a la compra de vacunas por la covid-19, además de ejecutar traslados a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
“Igualmente tenemos que recordar que, a raíz de la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), se incorporaron alrededor de ¢38.000 millones para gasto social que se fue en transferencias”, agregó.
Detalle del aumento en transferencias
Sobre el crecimiento en transferencia, el rubro está impulsado por ¢54.730 millones asignados a la CCSS.
De estos, ¢31.186 millones corresponden a la revalidación de saldos de un crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI) de $500 millones, los cuales fueron destinados para amortizar la deuda del Gobierno con la Caja, junto con ¢23.548 millones aprobados en el III presupuesto extraordinario para fondear las pensiones para personas de escasos recursos, del Régimen No Contributivo (RNC).
Al mismo tiempo, crecieron en ¢40.500 millones las transferencias a la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) para la compra de vacunas contra la covid-19.
Mediante revalidación de saldos de dos créditos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aprobados anteriormente, se suman otros ¢30.724 millones en transferencias para un programa de infraestructura del MOPT, manejado a través de un fideicomiso.
Otro incremento relevante corresponde a una transferencia de casi ¢10.000 millones al Patronato Nacional de la Infancia (PANI) para operación y mantenimiento de los albergues a su cargo.
En total, ¢78.679 millones del incremento en el rubro de transferencias, con respecto al presupuesto inicial, obedece a presupuestos extraordinarios.
Otros ¢63.885 millones tienen su origen en la revalidación automática de saldos de créditos externos.
“Del crecimiento total en la asignación presupuestaria, un 77,2% (¢110.330 millones) se destina a transferencias corrientes.
“Adicionalmente, al realizar un análisis por función, se observa que la mayoría de esta erogación se asocia a gasto social; específicamente, relacionado con el sector salud (50,3%), dado el mayor monto asignado a la CCSS”, reveló la Contraloría.
Baja en el gasto ejecutado
Al tiempo que aumenta el presupuesto para transferencias, se redujo en un 5% del gasto ejecutado en este rubro en los primeros cinco meses del año, en comparación con el mismo periodo del 2020.
Sin embargo, esta caída se explica por la incorporación al Presupuesto Nacional de los órganos desconcentrados de los ministerios (ODs), lo que significa que esas transferencias no se ejecutan de una vez.
Solo entre el período 2016-2020, las transferencias a los OD’s representaron en promedio el 17,2% del monto devengado al mes de mayo.
El monto devengado en transferencias es de ¢1,16 billones, con una ejecución del 36,3%.
Un 89% de los gastado corresponde a transferencias corrientes y el restante 10,6% a transferencias de capital.
El ministro de Hacienda confirmó que la reducción del gasto en transferencias se debe a la incorporación de los ODs al presupuesto general.
“Antes, las transferencias se iban directas hacia los ODs. Una vez que se trasladaban, ya se contaba como devengado para efectos presupuestarios. Eso, digamos, disminuía el porcentaje de no devengado.
“Ahora, la situación es distinta. Lo que tiene que ver, por ejemplo, con ingresos por transferencias de crédito revalidado, eso no se va de una vez, no se ejecuta de una vez, no se devenga de una vez”, explicó el ministro.