El Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) desarrolla mejoras de infraestructura en cinco parques nacionales de la zona sur, con el fin de reactivar el turismo y la economía en los cantones donde están ubicados. Se trata de los parques Marino Ballena, Corcovado y Piedras Blancas, en la bahía de Osa; Internacional La Amistad, en la cordillera de Talamanca y el Refugio Nacional de Vida Silvestre Golfito, en Golfito.
En esas áreas protegidas el Sinac ejecuta ¢1.722 millones, financiados por la Junta de Desarrollo Regional de la Zona Sur, en una serie de obras que incluyen construcción de senderos, módulos de hospedajes para funcionarios, un centro de visitantes y albergues para los turistas y baterías sanitarias.
El avance de las obras fue dado a conocer por el Gobierno, Judesur y la Fundación Corcovado (administradora de los recursos), durante una gira del presidente Carlos Alvarado a la zona sur, este sábado 26 de febrero. “Quiero agradecer el trabajo conjunto ejecutado para el desarrollo de este proyecto que pretende mejorar el producto turístico de las Áreas Silvestres Protegidas que tiene una alta importancia para el turismo, una de las principales actividades económicas que se desarrollan en las cercanías a estos espacios”, dijo el mandatario.
El presidente de Judesur, Edwin Duarte, explicó que los recursos tienen el fin de mejorar las condiciones de visitación turística, empleabilidad y conservación.
De las obras, por ejemplo, en el sector Ballena, en el parque Marino Ballena, la construcción de una batería sanitaria avanza en un 80%; y de un albergue para funcionarios, batería de sanitarios y una tienda en el sector de Piñuelas tienen un 70% de avance. La inversión es de ¢671,9 millones.
En Corcovado, en el sector Sirena, la construcción de una batería sanitaria en la entrada al sendero Los Naranjos y una caseta de registro de visitantes, tienen un 90% de avance. Aquí la inversión de ¢425,5 millones.
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Poca inversión
Costa Rica tiene 47 áreas silvestres protegidas entre parques nacionales, refugios de vida silvestre y reservas biológicas, que juntas cubren 12.561 kilómetros cuadrados, el 24% del territorio nacional. Sin embargo, la mayor parte está cerrada al público, pues, solo tiene acceso a 490 km², el 3,9% del total. Pese a que estos sitios generan ingresos millonarios al país, reciben una escasa inversión en servicios e infraestructura.
De los ¢63.216 millones del presupuesto del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), solo ¢1.959 millones se destinaron a mejoras y obras, equivalentes al 3% del plan de gastos; mientras que ¢30.109 millones del dinero restante se dirigió al pago de remuneraciones, equivalentes al 47,6%.
Así, los parque nacionales reciben poca inversión estatal en el desarrollo de obras, pese a que entre el año 2015 y el primer semestre del 2021, 10,2 millones de personas los visitaron, dejando ¢41.215 millones en ingresos por compra de entradas.
