Los diputados de la Comisión de Ambiente aprobaron, la mañana de este martes, una moción para solicitar criterio a la Conferencia Episcopal y la Alianza Evangélica sobre el proyecto que permitiría legalizar la marihuana de uso recreativo en Costa Rica.
La moción fue presentada por David Segura, diputado del Partido Nueva República, y fue aprobada por unanimidad por el resto de miembros del foro aunque varios adversaban la idea de consultar a las iglesias. Sin embargo, dieron su voto porque la convocatoria incluía otros sectores que sí les interesaba escuchar.
Segura defendió la “necesidad” de conocer la opinión de las autoridades eclesiásticas, pero los legisladores de otras bancadas consideraron que la iniciativa tiene la intención “obvia” de meter a la religión en el debate sobre este tema.
Defendió la convocatoria alegando que las iglesias han desempeñado un papel “muy importante” en la atención de personas con problemas de drogas y han destinado recursos de los costarricenses, como diezmos y ofrendas, en este tema.
“Este tipo de proyectos lo que va a venir es a aumentar la cantidad de personas (con adicción).
“Por esa razón, vemos fundamental que las instituciones religiosas que han abordado de cerca la problemática y que tienen experiencia puedan pronunciarse sobre los efectos, el costo social y lo que tendría para el país la legalización de la marihuana recreativa”, aseveró.
El fabricista también indicó que las organizaciones religiosas tienen expertos que pueden guiar la discusión del proyecto por lo que, según argumentó, la consulta no tiene que ver con temas religiosos.
“La Conferencia Episcopal y la Alianza Evangélica no son ignorantes. De hecho, tienen grandes profesionales, abogados, psicólogos que tratan estos temas y que podrían dar una opinión directamente de lo que han estado haciendo estos años para ayudar a las personas”, insistió.
Al respecto, su compañera de bancada, Rosalia Brown, consideró válido que la Iglesia emita su punto de vista “por la labor social” que realizan.
La moción aprobada por la Comisión de Ambiente busca escuchar el criterio, además de las iglesias, del Ministerio de Hacienda, la Academia Nacional de Medicina; Narcóticos Anónimos; la Asociación Costarricense para el Estudio de Intervención de Drogas, Psicología, Reducción de Riesgos y Daños; y la Red Latinoamericana y del Caribe de Personas que Usan Drogas.
Los diputados de la Comisión de Ambiente aprobaron, este martes, una moción para escuchar el criterio de varios sectores con respecto al proyecto para legalizar la marihuana de uso recreativo. Entre ellos, pidieron opinión a las autoridades eclesiales. Foto: Asamblea Legislativa
Voces en contra de la consulta
A pesar de los alegatos de Nueva República, diputados de otras fracciones están en contra de escuchar las opiniones de la comunidad religiosa.
Por ejemplo, Manuel Morales, del Partido Progreso Social Democrático (PPSD), aseguró que lo que él quiere es que “la política no se involucre con la fe”. Alegó que se debe tener claro que “el tema de la marihuana recreativa es científico y político”.
“Se debe legislar siempre desde la ciencia y no desde la fe (...). Necesitamos tener datos médicos, de combate al crimen, datos de los daños y beneficios que puede ser legalizar el consumo”, argumentó el congresista.
Morales explicó que las personas que actualmente consumen el cannabis son “profesionales, padres y madres de familia que actualmente tienen que comprárselo al crimen organizado” y que eso es lo que tiene que cambiar.
Una opinión similar expresó el frenteamplista Ariel Robles, quien sostuvo que la Iglesia no “tiene nada que ver con el proyecto”.
Mientras, la diputada del Partido Liberal Progresista, Kattia Cambronero, se manifestó en contra de hacer una consulta a actores sociales que carecen de criterios técnicos que sustenten sus argumentos.
Futuro incierto
El proyecto para legalizar la marihuana de uso recreativo apenas comienza su camino en la Asamblea Legislativa y tendrá que recibir, finalmente, el visto bueno de al menos 29 diputado para convertirse en ley de la República.
Según Manuel Morales, el plan podría “salir con los votos tallados”. Adelantó que las fracciones del Frente Amplio, del Liberal Progresista y la suya (Partido Progreso Social Democrático) están a favor.
Mientras, las bancadas de los partidos Unidad Social Cristiana (PUSC) y Liberación Nacional (PLN) están divididas.