El Teatro Arnoldo Herrera González del Conservatorio de Castella es una obra arquitectónica y artística fundamental del patrimonio cultural y artístico de Costa Rica, según recalca una comisión interdisciplinaria de la Universidad de Costa Rica (UCR) que analizó la relevancia de esta edificación.
El informe de la comisión, en la que participaron profesionales en Ingeniería Topográfica, Artes Plásticas, Arquitectura, Historia y Antropología, señala que la preservación de este espacio, ubicado al norte del parque La Sabana, es vital para el desarrollo artístico y cultural del país debido a su rol histórico “como plataforma para que la niñez y la juventud costarricense desarrolle sus talentos artísticos en un ambiente que honra y reconoce la importancia de las artes en la sociedad”.
El teatro empezó a edificarse en 1956 en un terreno donado por Carlos Millet De Castellà, quien tuvo la visión de crear un centro de arte. Fue diseñado por el arquitecto y pintor Rafael Ángel Felo García a solicitud de Arnoldo Herrera González, ambos ganadores del Premio Magón. Según el informe, este recinto representa un hito histórico para Costa Rica.
“La trascendencia histórica del Teatro Arnoldo Herrera González va más allá de la mera trayectoria a través de décadas del Conservatorio de Castella. El inmueble en sí mismo es una joya arquitectónica que, estructuralmente, mantiene su vigencia estética. A pesar del paso de los años, el diseño estructural cumple con todos los requerimientos de un teatro moderno”, señaló la comisión.
Juan Carlos Calderón Gómez, Celia Barrantes Jiménez, Rodolfo Mejías Cubero, Sofia Vindas Solano, Gabriela Sáenz Shelby, Mauricio Varela Vilches y Natalia Cordero Villalobos, integrantes del grupo interdisciplinario que realizó el informe, consideran que el Teatro Arnoldo Herrera González más que un edificio, es un monumento vivo del compromiso de Costa Rica con las artes, la cultura y la educación.
“Lo ha sido desde su concepción como testigo y legado de una época de visionaria apuesta por las artes en Centroamérica. Esto se afirma con la declaratoria del Conservatorio de Castella como institución benemérita de la Educación Costarricense en el año 2016, siendo el teatro una parte integral de esta institución”, señalan.
Según los expertos, este tipo de declaratorias evidencian que el propio Estado costarricense ha honrado y defendido su constitución y legado a lo largo de las décadas.
La polémica venta del Teatro del Castella
El informe que destaca el valor del Teatro Arnoldo Herrera se da a conocer más de seis meses después de la polémica que rodeó el recinto, pues la edificación fue vendida por $3,5 millones a la sociedad de responsabilidad limitada 3-102-897301, el pasado 28 de febrero.
El actor Gustavo Rojas, presidente de la Fundación del Conservatorio de Castella, se encargó de la venta que molestó a padres de familia del centro educativo y a la Junta Administrativa.
En abril, La Nación informó de que Rojas había afirmado que los fondos de la venta se colocarían en un fideicomiso de la Fundación que preside para la construcción de un nuevo teatro en la sede central del Castella, en Ulloa de Heredia, y reparar las instalaciones del centro educativo.
Sin embargo, la condición para hacer eso es que el Estado devuelva a la Fundación, en un plazo de 18 meses, la administración del terreno situado en Ulloa, al costado sur de la carretera General Cañas, así como la administración del lote del teatro.