Los cartagineses fueron despertados este domingo con bombetas y una alegre alborada para celebrar la “pasada” de la Virgen de Los Ángeles a la Catedral de Cartago, una tradición que celebran los católicos desde hace 243 años.
La Negrita salió de la Basílica de los Ángeles acompañada de una multitud de personas —no solo de Cartago, sino de otras zonas del país— quienes no quisieron perderse esta fiesta que se vive cada 3 de agosto en la ciudad de las brumas, y que congrega tanto a fieles de la Iglesia católica, como de otras religiones.
Si bien desde horas de la madrugada llovía en el cantón central de la Vieja Metrópoli, ni la lluvia ni el viento impidieron el traslado de la virgen y el acercamiento de los fieles sobre la avenida segunda, la calle que pasa al costado norte de las ruinas y frente a la municipalidad.
Aunque desde las 5 a. m. se realizaban celebraciones a lo interno de la Basílica, fue a las 8 a. m. cuando cuando inicio eucaristía, seguida de la procesión con la imagen de la virgen hasta la Catedral de Nuestra Señora del Carmen, escoltada por cuerpos policiales y de emergencia, como el de Bomberos .
Ahí, en medio de aplausos y ovaciones, los presentes esperaban con una misa, que fue presidida por el presbítero Walter Morales, párroco de la Parroquia San Francisco de Asís, de Agua Caliente.
Esa comunidad fue la encargada de la confección de la carroza donde iba La Negrita, la cual fue diseñada por Hernán Soto y Rebeca Zúñiga. En ella resaltaban las palabras: ¡Salve, oh madre de amor!, en medio de hermosas flores como girasoles, claveles, follajes, pomas, gerberas y rosas. Así como dos ángeles a cada lado de la imagen, junto a una réplica de la parroquia.
A partir de mediodía, en las afueras de la Catedral, se realizó la subasta ganadera, venta de comidas típicas y de todo tipo de productos agrícolas, como zanahorias, cebollas, lechugas, remolachas, papas y bananos que los agricultores ofrecieron a La Negrita, como agradecimiento por las bendiciones brindadas durante todo el año.
La Virgen de los Ángeles permanecerá por más de un mes en este recinto y todos los días se celebrarán misas, rosarios y salves en las que participan estudiantes de los diferentes centros educativos, empresas e instituciones públicas y privadas.
El domingo 7 de setiembre, volverá la Basílica de los Ángeles, el Santuario Nacional, en medio de hermosas y coloridas alfombras elaboradas por las diferentes parroquias cartaginesas.