El gobierno pagó ¢2.640 millones anuales en becas Avancemos a 36.456 personas que no estaban estudiando, a pesar de que ese es un requisito indispensable para acceder al subsidio, entre el 1.° de enero del 2022 y el 31 de agosto del 2025.
Así lo expuso la Contraloría General de la República (CGR) en un informe de auditoría sobre la eficiencia y eficacia del programa de bacas.
Las 36.456 personas beneficiadas de forma indebida, que representan el 6,8% de los beneficiarios, recibieron al menos un pago de la transferencia monetaria condicionada sin figurar en los registros de matrícula del Ministerio de Educación Pública (MEP).
El dinero girado de más, por año, habría alcanzado para beneficiar a 5.500 estudiantes con aportes mensuales de ¢40.000 durante un año, señala el informe DFOE-CAP-IAD-00006-2025, divulgado este 5 de noviembre.
La Contraloría advirtió de que estos pagos reflejan filtraciones que reducen la eficiencia del gasto público y restan recursos a estudiantes que sí cumplen con los requisitos del programa.
“La asignación de recursos a personas que no cumplían con la condición de ser estudiantes activos se debe, principalmente, a que el IMAS (Instituto Mixto de Ayuda Social) no contaba con la información actualizada sobre la matrícula estudiantil con la oportunidad y frecuencia necesaria para hacer las verificaciones", dice el informe.
No obstante, el informe reconoce mejoras recientes en la coordinación entre el IMAS y el MEP en el trámite, renovación y verificación de la ayuda económica, mediante la consulta de censos educativos en la plataforma Saber, con el fin de reducir requisitos al usuario.
Sin embargo, “persisten debilidades en el intercambio de información en tiempo real, necesarias para mejorar la oportunidad en la asignación y control del beneficio”.
Limitaciones presupuestarias
La Contraloría General también señaló que el programa Avancemos atraviesa dificultades financieras que han limitado su cobertura y eficacia. Entre el 2022 y el 2024, el presupuesto destinado al programa se redujo en un 19,5%, lo que impactó directamente su capacidad para atender a la población estudiantil en condición de pobreza o vulnerabilidad.
“La cobertura insuficiente del programa se explica, en gran medida, por la variabilidad en la asignación y disponibilidad de recursos destinados a la TMC Avancemos, los cuales dependen del presupuesto anual aprobado y de las transferencias mensuales que recibe el IMAS”, dice el informe.
Según el informe, la ausencia de un flujo financiero suficiente, oportuno y estable “impide programar de forma continua la atención de la población objetivo y aprovechar plenamente los recursos asignados, lo que pone en riesgo que un mayor número de estudiantes pueda recibir el beneficio y alcanzar el impacto positivo que el Programa ha demostrado generar en la permanencia educativa".
El programa Avancemos, creado en 2006 y respaldado por la Ley 9617, busca incentivar la permanencia y reincorporación de estudiantes provenientes de hogares en pobreza o vulnerabilidad, mediante transferencias condicionadas.
