El rescate de cerca de 800 objetos precolombinos en la construcción de un residencial en Agua Caliente de Cartago arroja diferentes preguntas sobre el destino de estas piezas, patrimonio de todos los costarricenses.
¿Qué sucederá con ellos? ¿Cuál será su destino? ¿En algún momento podremos verlas? Para responder estas y otras preguntas, La Nación habló con Luis Alberto Sánchez Herrera, arqueólogo fiscalizador del Museo Nacional.
El trabajo previo con las piezas arqueológicas
Antes de llegar a su destino, todas las piezas llevan un tratamiento riguroso.
Por eso, después de que son extraídas, se llevan a un laboratorio. Este rescate en Agua Caliente tiene la particularidad de que los trabajos se llevan en simultáneo y hay un equipo excavando y, en otro lugar, hay otro analizando las piezas ya extraídas.

El proceso de laboratorio consiste en primero lavar y limpiar las piezas, secarlas, analizarlas, y darles el contexto de donde fueron halladas.
Para ese contexto deben tener un código que las identifica según el lugar donde aparecieron, el estado de conservación y qué había alrededor de ellas.

Una vez que se tiene esto, el Museo tiene indicaciones de cómo debe embalarse cada pieza, cómo deben ser las cajas donde se deben colocar y cómo deben ir rotuladas.
Lo más delicado, afirmó Sánchez, se da en casos donde hay huesos que son de muy delicada manipulación. Esto también es importante porque son los que darán más datos para, en futuras investigaciones, conocer mejor de quiénes vivieron en este lugar.

En custodia del Museo
La ley establece que la custodia y cuidado de estas piezas pertenece al Museo Nacional. ¿Cómo se da este cuidado?
“En el caso de materiales muy delicados, como de tambores (que no se vieron en Agua Caliente), se solicitan equipos especializados, pero la mayor parte de las muestras se conservan bien en las cajas”, manifestó Sánchez.
Los restos humanos también requieren cuidados especiales, pero en el Museo se encargan de tenerlos en las mejores condiciones de preservación que también faciliten estudios a futuro.
¿Habrá exhibiciones?

La respuesta es sí, pero tal vez no tan rápido como muchos se imaginan. El proceso de excavación no termina y el de laboratorio puede tomar varios meses.
Luego de eso el Museo debe recibirlo y agregarlo a su inventario, lo cual también lleva su tiempo.
No obstante, sí hay buenas noticias. “No solo es recomendable exhibirlo, sino que es una obligación darlo a conocer”, especificó Sánchez.
Para el próximo año, la Municipalidad de Cartago y el Museo Nacional tendrán una exhibición sobre la historia precolombina del Valle del Guarco. Esta será en el Museo Municipal.
También, está la creación del Parque Arqueológico Agua Caliente, que se desarrollará en un terreno de 10 hectáreas propiedad del Museo Nacional, ubicado a pocos metros del residencial en construcción.
Este parque contará con un museo y lugares para conferencias, pero también con áreas verdes y de descanso. También será un sitio para la investigación arqueológica e historia.