
Costa Rica y la Región Sur de Francia (compuesta por Provenza, Alpes y la Costa Azul) firmaron hace dos semanas un cooperación pionera para conservar los océanos.
Se trata del proyecto Oceamp, que busca crear un modelo de gobernanza y gestión sostenible para las áreas marinas protegidas. Esta iniciativa cuenta con un financiamiento de 1.938.581 euros, de los cuales el 56% es cubierto por la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD).
El sistema trabaja con aliados estratégicos en ambos países. En Costa Rica son el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac), que actúa como co-maestro de obra, la Fundación Costa Rica Por Siempre (CRPS), como maestro de obra delegado, y la Universidad de Costa Rica (UCR).
Por su parte, por la Región Sur de Francia, los socios incluyen al Consejo Regional Provenza-Alpes-Costa Azul (maestro de obra y coordinador), la Red de Gestores de Áreas Marinas Protegidas en el Mediterráneo (MedPAN), el Parque Nacional de Port-Cros (PNPC), la Universidad Costa Azul (UniCA) y Septentrion Environnement.
El convenio tiene tres ejes:
1- El refuerzo de capacidades, que incluye el intercambio de conocimientos y formación para los gestores de las áreas marinas protegidas costarricenses y mediterráneas. Los temas abarcan la eficacia de la gestión, los impactos del cambio climático, los métodos de vigilancia y la restauración de ecosistemas marinos costeros como arrecifes de coral, pastos marinos y poblaciones de tortugas, así como la gestión de la degradación de playas en el Caribe.
2- La protección y restauración de ecosistemas marinos costeros. Se diseñarán líneas directrices y protocolos para la conservación. Una acción destacada será la realización de un inventario de pastos marinos en las costas del Pacífico y Caribe, y el desarrollo de metodologías para implementar proyectos piloto de restauración de estos ecosistemas vitales.
3- Educación y sensibilización ambiental. Acciones conjuntas en el ámbito escolar, universitario y el público general.
La Nación conversó con Renaud Muselier, presidente de la región sur de Francia durante su visita a Costa Rica. El habló de la importancia de la cooperación de la región francesa con un país como Costa Rica para la salud de los océanos.

- ¿Por qué es importante esta cooperación?
- Cuando fui ministro pude conocer la evolución y las escogencias de Costa Rica: la democracia, el desarrollo sostenible y la protección del ambiente.
“La región Provenza-Alpes-Costa Azul tiene muchas similitudes con Costa Rica: el número de habitantes, el número de kilómetros de costa, los espacios boscosos.
“Al ver la evolución de Costa Rica desde la primera vez que estuve en 2003 como ministro hasta 2017, ya como presidente de la Región Sur, y ver lo que habían hecho en ecoturismo y preservación de la biodiversidad. Quise entonces acercarme, con la autorización del gobierno francés por supuesto, para trabajar en lo que hemos denominado como duodiversidad”.
- ¿Cómo han visto ese trabajo conjunto en estos años?
- Nosotros hemos aprovechado su experiencia en términos de la reforestación. También hemos trabajado en la protección de algas marinas. Ustedes tienen el problema del coral, nosotros tenemos el de las algas marinas (sargazo).
“También hemos trabajado conjuntamente en temas de aguas para los campos. Ustedes tienen mucha, nosotros no tenemos.
“Y hemos dialogado sobre el acceso a los sitios turísticos, que debe ser organizado para evitar los picos de visitación que puedan poner impacto sobre el ambiente.
“Hace unos años visitamos el parque Corcovado y vimos cómo tenían organizadas las visitas para proteger al parque sin afectar al turismo.
“Y como país Francia ha tenido también la experiencia. El presidente Emmanuel Macron y el presidente Rodrigo Chaves co-organizaron la Cumbre de los Océanos en Niza el año pasado. Allí ‘se imprimió’ para el mundo entero el trabajo sobre las áreas marinas protegidas.
“Hemos recorrido un largo camino y estamos comprometidos en seguir caminando juntos. Ese es el objetivo de esta visita”.
- ¿Cómo se ve ese trabajo futuro?
- En el manejo de desechos podemos aportar desde nuestra experiencia, en lo que nosotros llamamos las ‘escalas sin humo’. Buscan que los grandes barcos de cruceros puedan conectarse en los muelles para que dejen de contaminar el agua y el aire.
- ¿Cómo han sido los frutos hasta ahora?
- Yo pienso que el “matrimonio” entre Costa Rica y la Región Sur de Francia ha dado “hijos” buenos y saludables.
“Ustedes tienen proyectos muy concretos con el tratamiento de plásticos en el mar. El plástico en cualquier mar es un problema para todos los mares del mundo. Y lo que propusimos en el marco de la cumbre de los océanos sobre el tratamiento del plástico es uno de esos compromisos.
“Costa Rica y Francia son pioneros en este campo.
“No conozco a todos los hijos de Costa Rica y Francia, pero he visto lo que se ha hecho en Corcovado y Cahuita y es algo que queremos seguir alimentando para el futuro”.
