
El estudiante Ángel David Mena Vargas podría no graduarse de duodécimo año, porque el Colegio Técnico Profesional (CTP) Roberto Gamboa Valverde le aplicó, aunque no debía, la prueba de comprensión auditiva de lenguas extranjeras: el alumno es una persona sorda.
Su madre, Rebeca Vargas, quien describe la situación como un atropello, explicó que el Ministerio de Educación Pública (MEP) declaró sin lugar su recurso de revocatoria, uno en el que ella expuso que según el Decreto Ejecutivo N.º 40862-MEP, los estudiantes identificados con código CP-04 (sordera) o CP-05 (pérdida auditiva) deben recibir ajustes razonables y apoyos educativos en las Pruebas Nacionales Estandarizadas, incluyendo la exclusión de la prueba de escucha cuando la condición del alumno limita la percepción del estímulo sonoro.
No obstante, en la resolución del MEP, firmada por Alvaro Artavia Medrano, director de la Dirección de Gestión y Evaluación de la Calidad, comentó que los apoyos educativos para el joven debieron ser registrados por el colegio previamente en la Plataforma de Apoyo Institucional (PAI). La madre de Mena asegura que eso no ocurrió.
“Cualquier situación vinculada con la aplicación de la prueba debió resolverse en el momento de su ejecución o consignarse en el acta de incidencias correspondiente.
“De la revisión de los registros oficiales de aplicación, no se constata incidencia alguna que invalide la aplicación de la prueba ni el resultado informado. En consecuencia, su argumentación resulta improcedente y se declara sin lugar el recurso de revocatoria”, dice la resolución en la que rechazaron la revocatoria.
Vargas enfatizó en que su hijo de 18 años presenta Hipoacusia Neurosensorial Severa, condición auditiva que dice es reconocida por el centro educativo y que ha sido atendida mediante Educación Especial, asimismo, señala que está debidamente documentada en su expediente institucional.
Sobre el caso, la oficina de comunicación del MEP informó que la mañana de este 25 de noviembre funcionarios de la Dirección Regional, de la Dirección de Gestión y Evaluación de la Calidad y del centro educativo se reunieron para atender el caso y resolver la situación.
La madre fue convocada a una reunión a las 2 p. m. para abordar el caso. Ella acudirá con su abogado. Si bien planea proceder interponiendo un recurso de amparo ante la Sala Constitucional, su preocupación es que Ángel David no pueda graduarse el 11 de diciembre.
El estudiante aprobó todas sus materias y las pruebas nacionales estandarizadas, incluso ganó el examen escrito de inglés.
“Un atropello”
Vargas califica lo sucedido como un atropello contra su hijo por parte del centro educativo. Narra que el día del examen el muchacho fue apartado de sus compañeros y llevado a otra aula en la que pusieron un parlante a todo volumen.
“Él no escucha en español menos va escuchar en inglés”, contó la madre, quien afirma que gracias al uso de audífonos su hijo oye apenas la mitad de lo que puede oír una persona oyente.
La aspiración de Vargas es que anulen el exámen y que su hijo se pueda graduar.
