
Una mujer de 80 años murió en una isla remota de Australia luego de que su crucero partiera sin advertir que ella no había regresado a bordo. El hecho ocurrió el fin de semana durante una excursión en la isla Lizard, ubicada cerca de la Gran Barrera de Coral, según reportes de medios locales.
La víctima, identificada como Suzanne Rees, participaba en un viaje de 60 días valorado en $80.000. Durante una caminata en la isla, se sintió mal y recibió la recomendación de regresar sola al barco. Sin embargo, el crucero zarpó sin realizar un recuento completo de los pasajeros.
De acuerdo con el relato de su hija, Katherine Rees, su madre murió sola en algún punto del trayecto de regreso. Afirmó que la familia se encuentra consternada por lo sucedido y responsabilizó al personal del crucero por una “falta de atención y sentido común”.
Alarma tardía
La desaparición se detectó hasta las 6 p. m. del sábado, varias horas después de que el grupo de buceo regresara al barco. Testigos afirmaron que la tripulación solo verificó a quienes habían participado en esa actividad, pero no a los demás pasajeros.
Una marinera identificada como Traci Ayris, que se encontraba anclada cerca, expresó su sorpresa por la rapidez con la que el barco abandonó la isla.
El crucero había salido de Cairns el día anterior. Una vez notificada la desaparición, regresó a Lizard Island a las 2 a. m. del domingo. Las operaciones de búsqueda iniciaron a medianoche con el despliegue de un helicóptero de rescate y siete tripulantes rastreando senderos con linternas.
El cuerpo de Suzanne Rees apareció en la madrugada en una zona conocida como Telstra Rock, lugar donde había sido vista por última vez.
Investigación en curso
La Autoridad Australiana de Seguridad Marítima (AMSA) confirmó que recibió el aviso de desaparición a las 9 p. m. del sábado. El cuerpo fue trasladado en helicóptero la tarde del lunes 27 de octubre.
Las autoridades investigan por qué la alerta se emitió tan tarde y si una respuesta más rápida habría podido salvar la vida de la mujer. Se sospecha que pudo haber caído por un acantilado al intentar descender por su cuenta.
La empresa responsable del viaje, Coral Expeditions, emitió un comunicado en el que lamentó el fallecimiento y aseguró estar colaborando con la Policía de Queensland. Su director ejecutivo, Mark Fifield, expresó condolencias y reiteró su apoyo a los familiares.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
