Bruselas. Forzado por un acuerdo de cooperación firmado con la justicia belga, el exeurodiputado italiano Pier Antonio Panzeri revelarà todos los detalles del escándalo conocido como “Catargate”. El abogado Laurent Kennes dijo que su defendido Panzeri “no es un enemigo de nadie. Simplemente va a colaborar”.
Además, dijo que es “importante considerar que no le están haciendo un regalo”, sino que “decidió asegurar su situación y negociar una sentencia”. Panzeri, fue detenido en diciembre como parte del espectacular escándalo que sacudió al Parlamento Europeo y además considerado una actor clave, sorprendió a todos el 17 de enero al firmar el acuerdo de cooperación judicial.
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El exeurodiptuado es la figura central de la supuesta red, que se remontaba a 2014 y que distribuyó sobornos en efectivo, supuestamente financiados por Qatar y Marruecos.
Panzeri fue eurodiputado de 2004 a 2019, aunque el fin de su mandato permaneció en Bruselas al frente de una oenegé supuestamente dedicada a combatir la impunidad.
Por el acuerdo de cooperación, ahora está comprometido a informar a la justicia detalles sobre la red de corrupción de la que admite haber participado.
Según explicó Kennes, Panzeri debe repasar a los instigadores toda la historia, todas las relaciones, todo lo que pasó desde 2014, e incluso antes, en términos de contactos. Y también los mecanismos financieros que se utilizaron.
Preocupación familiar
El escándalo provocó el arresto de Panzeri y otras tres personas, incluida la eurodiputada Eva Kaili, vicepresidenta del Parlamento Europeo, pero las declaraciones del exlegislador italiano podrían exponer aún más a más personas.
Un informe filtrado a la prensa, por ejemplo, sugiere la participación del eurodiputado socialista belga Marc Tarabella, quien a través de su abogado negó recibir cualquier “regalo o dinero”.
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En este sentido, Kennes prefirió la cautela: “Quiero recordar que las acusaciones que pueda presentar el señor Panzeri no son suficientes para condenar a alguien, habrá que corroborar con otros elementos”.
Panzeri, dijo Kennes, aún será interrogado numerosas veces por los investigadores belgas.
"El fiscal tiene la posibilidad de denunciar y cancelar el acuerdo [de cooperación} si considera que las confesiones [de Panzeri] no se corresponden con la realidad", dijo el abogado.
Panzeri tiene 68 años, y un juicio por corrupción puede tardar varios años en avanzar en los tribunales, por lo que, argumentó el abogado, el exeurodiptuado tiene todas las razones para cooperar.
“Estaba muy preocupado por su esposa y su hija, y ahora espera un poco de generosidad”, dijo Kennes.