
Ginebra. La pandemia de coronavirus “está amenazando a toda la humanidad”, afirmó el miércoles el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, al lanzar un plan de respuesta mundial que se extenderá hasta diciembre con la meta de recaudar donaciones por hasta $2.000 millones.
El objetivo del Plan Mundial de Respuesta Humanitaria a la Covid-19 es combatir el virus “en los países más pobres del mundo” y responder a las necesidades de las personas más vulnerables, dijo Guterres en una declaración en video.
“No basta con la respuesta individual de cada país”, afirmó el ex primer ministro portugués, quien había advertido la semana pasada de la perspectiva de “millones” de muertos si no se coordinaba una respuesta global para contener la “catástrofe sanitaria” producto de la pandemia.
Las manifestaciones de Guterres tuvieron lugar en momentos cuando la pandemia ya ha quitado la vida a por lo menos 20.600 personas y contagiado tantas como 450.000, según el recuento que diario realiza la AFP.
Más de 3.000 millones de personas estaban el miércoles bajo medidas de confinamiento alrededor del mundo para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
España se sumó a Italia al superar el número de fallecidos en China, donde el virus se reportó por primera vez hace solo tres meses. Y Estados Unidos es el país donde el contagio avanza más rápidamente.
El plan de la ONU -indicó el secretario general- buscará “acudir en ayuda de las personas extremadamente vulnerables”, en especial las personas mayores, los enfermos crónicos, los discapacitados, las mujeres y los niños.
El coronavirus “está llegando a países donde ya se viven crisis humanitarias causadas por los conflictos, los desastres naturales y el cambio climático”, manifestó Guterres. Ahí, “la gente, que se ha visto obligada a huir de sus hogares por las bombas, la violencia o las inundaciones, vive bajo cubiertas de plástico en los campos, o hacinada en campos de refugiados o asentamientos informales”.
"Esas personas no tienen un hogar en el que puedan practicar el aislamiento social" y "les falta agua limpia y jabón para realizar el acto más básico de protección personal contra el virus: lavarse las manos".
"Si no tomamos medidas decisivas en este mismo instante, me temo que el virus cobrará arraigo en los países más frágiles y todo el mundo será vulnerable a medida que continúa su marcha alrededor del planeta", sentenció.
El plan -modesto a la vista de los $2 billones desbloqueados por Washington para la economía estadounidense- tiene como objetivo cubrir el periodo entre abril y diciembre del 2020, lo que hace prever una crisis mayor y prolongada.
El monto, de $2.012 millones, incluye los llamados a donaciones ya lanzados por diferentes agencias de Naciones Unidas (como la Organización Mundial de la Salud, Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Alto Comisionado para los Refugiados, Unicef). La OMS recibiría $450 millones, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) $405 millones y el PMA $350 millones.
Salvar vidas
“Si se financia adecuadamente, el plan salvará muchas vidas”, dijo Guterres.
El dirigente también pidió a los 193 miembros de Naciones Unidas continuar alimentando el fondo para la ayuda humanitaria, que anualmente beneficia a 100 millones de personas en el mundo. Sin esos fondos, la pandemia podría acarrear otras epidemias como cólera.

Detallado en un documento de 80 páginas, el nuevo plan humanitario será ejecutado por las distintas agencias de Naciones Unidas con las ONG en un “rol directo”, bajo la coordinación del secretario general adjunto de Naciones Unidas para asuntos humanitarios, el británico Mark Lowcock.
Los fondos recogidos permitirán comprar equipos médicos para hacer pruebas y tratar a los enfermos, instalar estaciones de lavado de manos en los campos de refugiados, lanzar campañas de información y establecer puentes aéreos humanitarios con África, Asia y América Latina, precisó la ONU.
Aunque las necesidades precisas de varios países no están aún definidas, el documento identifica a una veintena de naciones prioritarias para recibir ayuda: Afganistán, Libia, Siria, Yemen, Venezuela, entre otros. También, los casos de Irán o Corea del Norte son analizados en el documento.
Naciones Unidas estima dos escenarios sobre la evolución de la pandemia, subrayando la dificultad de hacer predicciones.

El primero contempla una desaceleración de la propagación del coronavirus de “tres a cuatro meses” lo que permitiría “una recuperación relativamente rápida”, tanto en el plano sanitario como en el económico.
El segundo incluye una “progresión rápida de la pandemia en los países frágiles y en desarrollo”, principalmente de África, Asia y ciertas partes del continente americano. Ello implicaría un cierre más prolongado de las fronteras y la continuación de las órdenes de confinamiento “contribuyendo aún más a la desaceleración mundial que ya está en curso”.