
Washington. El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump duplicó este jueves a $50 millones la recompensa por información que conduzca al arresto del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a quien acusa de liderar operaciones de narcotráfico y colaborar con organizaciones criminales internacionales.
“Es uno de los narcotraficantes más grandes del mundo y una amenaza para nuestra seguridad nacional”, afirmó la fiscal general Pam Bondi en un video publicado en su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter).
Bondi señaló que Maduro utiliza alianzas con el Tren de Aragua, el Cártel de Sinaloa y el llamado Cártel de los Soles para introducir “drogas letales y violencia” en territorio estadounidense.
De acuerdo con datos citados por la fiscal, la DEA ha decomisado 30 toneladas de cocaína vinculadas al círculo del mandatario, incluidas siete toneladas presuntamente conectadas directamente a él. Parte de esta droga estaría mezclada con fentanilo, potente opioide que agrava la crisis de salud pública en EE. UU.
Además, el Departamento de Justicia reportó la incautación de más de $700 millones en activos relacionados con Maduro, incluyendo dos aviones privados y nueve vehículos.
"Bajo el liderazgo del presidente Trump, Maduro no escapará de la justicia y responderá por sus atroces crímenes“, insistió Bondi. También proporcionó una línea telefónica para recibir información que permita su captura.
Caracas rechaza los señalamientos
Desde Venezuela, el gobierno de Maduro rechazó de inmediato la medida. El canciller Yván Gil calificó la recompensa como una “ridícula cortina de humo” y una “burda operación de propaganda política”.
“El show de Bondi es un chiste, una desesperada distracción de sus propias miserias. La dignidad de nuestra patria no está en venta”, afirmó Gil mediante Telegram.
El secretario de Estado Marco Rubio recalcó en un comunicado que Estados Unidos no reconoce a Maduro como presidente de Venezuela. Afirmó que su supuesta victoria en las elecciones del 28 de julio de 2024 carece de evidencia y forma parte de una estrategia para aferrarse al poder tras “estrangular la democracia”.
Rubio también recordó que tanto las administraciones de Trump como la del expresidente Joe Biden reconocieron como “presidente legítimo” al opositor Edmundo González Urrutia, quien reclama haber ganado los comicios de 2024.
Recompensas en aumento
En 2020, durante el primer mandato de Trump, el Departamento de Justicia acusó a Maduro de narcoterrorismo y ofreció 15 millones de dólares por su captura. Biden elevó la cifra a 25 millones, y ahora Trump, en su segundo mandato, la duplica nuevamente.
El precedente más conocido de acusación formal contra un presidente extranjero por parte de Estados Unidos fue en 1988, cuando se imputó al panameño Manuel Noriega, quien luego fue derrocado mediante una invasión militar en 1989.
Negociaciones paralelas
Pese a la postura agresiva de Washington, se han mantenido canales diplomáticos puntuales. En julio pasado, con mediación de El Salvador, se logró la liberación de 10 ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela.
No obstante, la Casa Blanca mantiene firme su acusación contra el chavismo de controlar al Tren de Aragua, declarado organización terrorista global por EE. UU., y cuya influencia se ha expandido por la región.
México dice que no tiene pruebas
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dijo que su gobierno no tiene pruebas de que el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, tenga nexos con el cártel de Sinaloa, como afirmó Estados Unidos.
“Si tienen alguna prueba que la muestren, no tenemos ninguna prueba relacionada con eso”, dijo Sheinbaum en su habitual rueda de prensa.
“Es la primera vez que oímos ese tema, no hay de parte de México ninguna investigación que tenga que ver con eso”, añadió.