
Washington, Estados Unidos. Los turistas extranjeros que visiten los parques nacionales de Estados Unidos, incluido el Gran Cañón y Yellowstone, ahora tendrán que pagar un recargo considerable, anunció el gobierno de Donald Trump el martes.
El Departamento del Interior, que opera los renombrados parques nacionales estadounidenses, dijo que a partir de 2026 los visitantes extranjeros tendrán que pagar $100 adicionales al costo individual de entrada al parque para acceder a once de los destinos más populares del sistema.
El costo de un pase anual para todos los parques, por su parte, subirá a $250 para los no residentes, más de tres veces su precio actual.
“Estas políticas aseguran que los contribuyentes estadounidenses, quienes ya apoyan al Sistema de Parques Nacionales, continúen disfrutando de acceso asequible, mientras que los visitantes internacionales contribuyen con su parte justa para mantener y mejorar nuestros parques para las generaciones futuras”, dijo el secretario del Interior, Doug Burgum, en un comunicado.
Considerados durante mucho tiempo como una joya del turismo estadounidense, los 63 parques nacionales oficialmente designados reciben cientos de millones de visitantes al año. Fueron casi 332 millones en 2024, según el Servicio de Parques Nacionales.
El precio estándar de un pase “América la Bella” que ofrece acceso anual ilimitado actualmente es de $80 para cualquier visitante.
Para uso diario, algunos parques cobran tarifas por vehículo y otros por persona. El pase anual cubre a todos los pasajeros más el titular del pase, o hasta cuatro adultos.
Los no residentes de Estados Unidos que compren un pase anual no estarán sujetos al recargo de $100 para entrar a los parques más visitados, incluidos los Everglades de Florida, Acadia de Maine y Yosemite de California, pero esa tarifa aplicará a todos los demás visitantes extranjeros.
Los costos adicionales significativos para la mayoría de los extranjeros siguen la orden ejecutiva de julio del presidente Trump destinada a “preservar” los parques para “las familias estadounidenses”.
El departamento anunció la creación de los “días patrióticos sin tarifa”, gratuitos para los residentes, que incluirían el Día del Presidente, el Día del Veterano y el cumpleaños de Trump, que coincide con la observancia anual del Día de la Bandera.
