Ginebra y otras procedencias. EFE, AFP. El mundo se enfrenta con una “grave crisis humana” en los países de África occidental afectados por la epidemia de Ebola , advirtió ayer la ONU, que solicitó a la comunidad internacional $1.000 millones para poder contener la “exponencial” progresión del virus.
Valerie Amos, la secretaria general adjunta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Asuntos Humanitarios, advirtió en Ginebra de que la capacidad de esos países “para hacer frente a la situación está al borde del colapso. Es una amenaza muy seria, por lo que tenemos que actuar ahora para evitar una tragedia mayor”.
Los datos no dejan lugar a dudas: las últimas cifras registradas y recopiladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestran un total de 4.985 contagios, de los cuales 2.461 enfermos han fallecido, lo cual revela una tasa de mortalidad que varía entre el 60% y el 70% , según los países.
Pero el aspecto más grave y preocupante es que el 40% de los casos surgieron en los últimos 21 días –el virus del Ébola tiene un periodo de incubación de tres semanas–, lo que se ha repetido en los últimos recuentos que mantiene la OMS.
Lo anterior indica que la epidemia que surgió en marzo en Guinea Conakry y que después se expandió a Liberia y Sierra Leona está ahora creciendo “exponencialmente”, manifestó, en rueda de prensa, el director general adjunto de la OMS, Bruce Aylward.
Ante “el riesgo de una catástrofe humana” –en palabras de Aylward– , la ONU decidió lanzar un programa global de asistencia dotado de casi $1.000 millones.
De estos, $473,3 millones se destinarían a Liberia, el país más afectado por la epidemia; $220,5 millones a Sierra Leona, $194,2 millones a Guinea y $57,5 millones a servicios comunes.
Hoy, según los cálculos del coordinador de la ONU para la lucha contra el ébola, David Nabarro, solo se cuenta con un 30% de los fondos que se necesitan.
Este plan persigue eminentemente cinco objetivos: detener los contagios, tratar a los infectados, asegurar los servicios esenciales, preservar la estabilidad de los países más afectados y prevenir nuevos brotes en países que no han registrado contagios.
Movilización internacional. Horas después de la alerta de la ONU, Estados Unidos sometió a sus 14 socios del Consejo de Seguridad de ese foro un proyecto de resolución destinado a movilizar a los Gobiernos contra el avance inquietante de la epidemia de ébola en África.
Ese texto debería ser adoptado en una reunión de urgencia, mañana, del Consejo, que en setiembre lo preside Estados Unidos.
Según el proyecto, el Consejo de Seguridad “decide que el crecimiento sin precedentes de la epidemia de ébola representa una amenaza para la paz y la seguridad internacionales”.
También, se invita a los países miembros y organizaciones como la Unión Africana (UA) y la Unión Europea (UE) a “movilizarse inmediatamente” para formar personal médico y de laboratorios a fin de acelerar la detección y el tratamiento de los casos sospechosos.
Por su lado, el mandatario estadounidense, Barack Obama, expresó ayer que la comunidad internacional debe “actuar rápido” para detener la enfermedad.
“Es una amenaza potencial para la seguridad mundial”, dijo durante un discurso en el que anunció el envío de 3.000 militares estadounidenses a África occidental para ayudar en el combate del virus.