Adís Abeba. Más de 150 camiones de ayuda humanitaria llegaron en los últimos dos días a la región etíope de Tigré, donde, según la Organización de Naciones Unidas (ONU), millones de personas están amenazadas de hambruna.
Desde hace una semana, las autoridades etíopes aumentaron sus esfuerzos “para coordinar mejor y facilitar el desplazamiento de la ayuda humanitaria” hacia Tigré, indicó el Ministerio etíope de la Paz.
Unos 500 camiones consiguieron llegar hasta esa zona en la última semana, 152 de ellos en un periodo de 48 horas, precisó el ministerio en un comunicado publicado este sábado en Twitter.
Según las estimaciones, 5,2 millones de personas, equivalentes al 90% de la población de Tigré, necesitan ayuda urgentemente. Unas 400.000 personas están ya al borde de la hambruna.
El coordinador de Naciones Unidas para la yuda humanitaria en Etiopía, Grant Leaity, advirtió el jueves que la situación iba a “empeorar dramáticamente” e instó a todas las partes a permitir el avance de la ayuda “para evitar esta catástrofe inminente”.
Millones de personas están amenazadas de hambruna, 1,7 millones de ellas en las regiones de Afar y Amhara, vecinas de Tigré, añadió Leaity.
“Las existencias de ayuda humanitaria, el dinero en efectivo y la gasolina están agotándose o se han agotado ya”, alertó el vocero.
El norte de Etiopía está sumido en combates desde noviembre, cuando el primer ministro Abiy Ahmed envió al ejército federal a Tigré para derrocar a las autoridades locales disidentes del Frente de Liberación del Pueblo de Tigré (TPLF).
El conflicto se ha ido alargando y a finales de junio las fuerzas pro-TPLF recuperaron el control en la mayor parte de Tigré, para luego proseguir su ofensiva en las regiones de Amhara y Afar. Esto ha ocasionado una grave crisis humanitaria en la zona.
Tanto las autoridades etíopes como los rebeldes se acusan recíprocamente de obstaculizar el paso de los convoyes de ayuda humanitaria.