SANTIAGO. AFP. Una empoderada sociedad chilena comenzó a poner bajo la lupa a sus nuevos gobernantes y así exigir antecedentes limpios, y forzar a modificar el gabinete de Michelle Bachelet incluso antes de asumir oficialmente.

La renuncia de tres subsecretarios designados para el gobierno de la socialista, quien dijo que escogería personalmente a los mejores para acompañarla, marcó la accidentada antesala de su asunción, el 11 de marzo.
Se trata de un debate por los conflictos de interés o por la calidad de las trayectorias de quienes ocupan cargos estratégicos, que antes no se daba con tanta intensidad, explicó Marcelo Mella, politólogo de la Universidad de Santiago de Chile.
Ahora más que nunca, los medios hurgan en el pasado de los nombrados y encuentran problemas judiciales y situaciones comprometidas.
La nombrada viceministra de Educación desistió de asumir tras las acusaciones de los estudiantes de un posible conflicto de interés por sus vínculos familiares con escuelas subvencionadas y por haberse pronunciado contra la gratuidad en la educación.
El lunes, el designado subsecretario de Agricultura declinó el cargo por dos presuntos delitos económicos, y el de Bienes Nacionales, por haber sido condenado por tocar a una pasajera en el metro.
Con la llegada de Sebastián Piñera al poder en el 2010, un multimillonario empresario que tuvo que deshacerse de varios negocios como una aerolínea, un canal de televisión o un club de fútbol para asumir, la sociedad chilena puso sus antenas ante los conflictos.
“Tanto los estudiantes como los distintos movimientos sociales instalaron la idea de que el ciudadano no es solo un ciudadano pasivo, que a través de una manifestación o una exigencia se pueden llegar a modificar decisiones políticas”, explicó Robert Funk, politólogo de la Universidad de Chile.
Funk agregó que la próxima mandataria y su entorno están bajo el escrutinio de la ciudadanía.
“Ser más transparente en el diseño del equipo tiene la ventaja que al momento de las designaciones definitivas, la opinión pública y los medios ya han sido exhaustivos en la exploración de todos los antecedentes”, afirmó el politólogo Cristóbal Bellolio.