Al menos 22 cristianos murieron y 63 más resultaron heridos en un atentado con bomba perpetrado este domingo 22 de junio, día santo cristiano, contra la Iglesia de San Elías en el barrio de Duweila, en el centro de Damasco, Siria.
El Ministerio de Sanidad confirmó este balance a la agencia de noticias estatal SANA sobre un atentado que fue perpetrado en el momento en el que se celebraba la misa, cuando el templo estaba lleno de fieles de la rama ortodoxa griega del cristianismo. Es el primer ataque de este tipo contra una iglesia en Damasco en años.
La cartera ministerial anunció asimismo que se trata de un “atentado suicida”, que atribuye al Estado Islámico. El atacante “entró en la Iglesia de San Elías, abrió fuego y después se detonó con un chaleco explosivo”.
“Las fuerzas de seguridad se han desplazado rápidamente hasta el lugar, han acordonado la zona y los equipos especializados han comenzado a recolectar pruebas y a investigar las circunstancias del ataque”, añadió.
La Gobernación de Damasco manifestó su “preocupación” por el “cobarde” atentado contra la Iglesia de San Elías, que condenó “enérgicamente”.

El embajador de Estados Unidos para Siria, Tom Barrack, expresó sus condolencias a las víctimas, familiares y afectados en el atentado. “Estos terribles actos de cobardía no tienen cabida en el nuevo tejido de tolerancia integrada e inclusión que están tejiendo los sirios. Seguimos apoyando al Gobierno sirio en su lucha contra quienes quieren crear inestabilidad y miedo en su país y en toda la región”, apuntó en X.
Por su parte, el enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, pidió una “investigación completa y la actuación de las autoridades” sobre un suceso que calificó de “crimen atroz”. En un escueto comunicado, condenó el atentado e hizo un llamado a la población siria a “unirse en el rechazo al terrorismo, el extremismo, la incitación y los ataques contra cualquier comunidad en” el país.
El director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdelrahman, denunció la presencia de yihadistas en el sur de Damasco ante la pasividad de las autoridades.
“He hablado mucho de la presencia de grupos terroristas extremistas en el sur de la capital de Damasco. Negaban su existencia y ahora han comenzado los atentados suicidas”, denunció en declaraciones a la cadena France 24. “Es necesaria una operación intensiva de seguridad porque hay decenas de suicidas de Estado Islámico en el sur de Damasco”, apuntó.