Nissan, la empresa japonesa fabricante de automóviles, anunció el recorte de 20.000 de sus colaboradores como parte de una estrategia para mejorar el rendimiento e innovación en el mercado, conocida como Re:Nissan.
Este martes, según informó Agence France-Presse (AFP), reportó pérdidas anuales de $4.500 millones, por lo que decidió renunciar al 15% de su planilla, aludiendo además sobre el posible impacto de los nuevos aranceles establecidos por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Ana Lucrecia Vargas, directora de mercadeo de Grupo Danissa, la corporación que gestiona la marca Nissan en Costa Rica, aseguró que pese al anuncio, “en Costa Rica no se está planeando ninguna reducción”.
A nivel global, la empresa se encuentra en medio de un fuerte endeudamiento que la llevó a intentar unirse a Honda, otro fabricante del mismo país e industria, pero fracasó, lo que dio pie al plan.
“La realidad es clara. Tenemos una estructura de costos muy elevada y para complicar aún más las cosas, el entorno del mercado mundial es volátil e impredecible, lo que hace que la planificación y la inversión sean un desafío cada vez mayor”, dijo Iván Espinosa, presidente ejecutivo de la marca, a la prensa.
En los últimos tres años, Nissan tuvo una renovación del 70% de su portafolio. En Costa Rica, la marca tiene 65 años de presencia y el concesionario es Grupo Danissa. El año pasado, la marca tuvo un crecimiento de más de un 35% en ventas en el país y efectuó nuevas inversiones en el oeste del Gran Área Metropolitana.
