El déficit del Gobierno Central acumulado a noviembre de este año alcanzó ¢1,6 billones, lo cual representa un 5% de la producción interna. El resultado es más alto que el 4,3% de la producción acumulado en el mismo periodo del 2016.
Los gastos totales crecieron casi al doble de los ingresos en el periodo de enero a noviembre respecto a igual periodo del año anterior (9,8% y 5,4%, respectivamente).
“Los intereses continúan aumentando y se convierten en el principal rubro que presiona el déficit fiscal. A noviembre 2016, el saldo acumulado de intereses ascendió a 2,4% del PIB (Producto Interno Bruto), mientras que en igual mes de este año, la suma alcanza el 2,8% del PIB", señaló el Ministerio de Hacienda en un comunicado la mañana de este jueves 21 de diciembre.
Para el Ministerio de Hacienda, un aspecto positivo que se evidencia en las cifras a noviembre, es el dinamismo que sigue mostrando el gasto de capital, destinado a infraestructura vial y educativa, principalmente.
A noviembre de este año, este rubro registra una variación del 22% y su relación al PIB pasa de 1,1% a 1,3%, de noviembre del 2016 a igual periodo del 2017.
El economista Alberto Franco destacó que hay una aceleración de prácticamente todos los principales rubros del gasto, relativo al mismo periodo del 2016.
“Solo las transferencias corrientes, que son el rubro que mayor peso tiene dentro del gasto total (cercano al 40%), crecen a un ritmo levemente inferior al del año pasado”, comentó Franco.
Renta sube, pero ingresos se desaceleran
Entre los ingresos, señaló el Ministerio de Hacienda, destaca el impuesto sobre la renta, que mantiene un crecimiento en dos dígitos (11,5%) y sube de 3,7% a 3,9% del PIB, de noviembre del 2016 a igual mes del 2017.
“No obstante, este comportamiento no impide la desaceleración de los ingresos tributarios, los cuales pasan de aumentar un 8,5%, en noviembre de 2016, a 5,4% en igual periodo de este año. Dicho porcentaje se ve afectado por la reducción en la importación de vehículos experimentada durante los últimos meses y la desaceleración en algunos sectores de la economía”, señaló el Ministerio de Hacienda.
Helio Fallas, primer vicepresidente y ministro de Hacienda, comentó que los hechos experimentados en este último semestre, como la reprogramación de pagos de algunas obligaciones, solo muestran una pequeña parte del problema fiscal que atraviesa nuestro país.
“Si bien seguimos cumpliendo con la atención de todas las obligaciones del Gobierno, (de) no tomar decisiones prontas para fortalecer las finanzas públicas mediante la aprobación de los proyectos de ley propuestos ante el Legislativo, en materia de ingreso y gasto, las consecuencias económicas y sociales serán mucho más difíciles de enfrentar”, advirtió el Ministro.
Añadió que tanto el Gobierno, como diferentes expertos internacionales, han insistido vehemente en la urgencia de tomar decisiones para dar más herramientas legales a la Hacienda Pública.
“El costo de la postergación de estas decisiones es sumamente alto, sobre todo para los sectores más vulnerables”, resaltó Fallas.
Por su parte, Franco, comentó que el fuerte incremento en el faltante entre ingresos y gastos, que sube en prácticamente ¢300.000 millones, respecto al periodo de enero a noviembre del 2016, y su financiamiento casi total con recursos internos, intensifica el estrujamiento del crédito al sector privado y explica, en parte, los episodios recientes de estrechez de liquidez de Hacienda, y la continuada presión al alza sobre el nivel de las tasas de interés locales.