La Dirección General de Tributación impuso un cobro de ¢20.425 millones a Radiográfica Costarricense S.A. (Racsa), porque la compañía no aplicaba el impuesto sobre las ventas a sus clientes.
El fisco realizó una auditoría tributaria de los periodos del 2008 al 2013 por el servicio de comercialización de Internet.
Racsa canceló lo adeudado en el 2014, según el estado de resultados de ganancias y pérdidas de ese año, del cual tiene copia La Nación .
Francisco Calvo, gerente general de Racsa, dijo que el cobro de Tributación correspondió a periodos fiscales anteriores a la actual administración.
“En 2014 y 2015 se ejecutó un plan para atender las obligaciones con el Ministerio de Hacienda, en relación con la no recaudación de impuesto sobre las ventas del periodo entre el 2008 y el 2014”, detalló Calvo.
Carlos Vargas, director de Tributación, confirmó en mayo del año pasado que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) efectuó la cancelación de la deuda tributaria de su compañía subsidiaria.
“El ICE efectivamente realizó y canceló el arreglo de pago. En materia tributaria solo existe el pago de la deuda determinada por la Administración”, enfatizó Vargas.
El pago de la obligación tributaria ocurrió después de que, en el 2013, el Tribunal Contencioso-Administrativo diera la razón a la Dirección General de Tributación de la obligación de la empresa pública de aplicar el impuesto sobre las ventas a sus clientes.
En la sentencia, el Tribunal catalogó de correcta la interpretación del fisco de gravar la comercialización de Internet con el tributo , sin importar la forma en que se brinde el servicio.
Racsa vende Internet a 20.00 clientes, la mayoría empresas.