
Las exportaciones de bienes superaron los $20.000 millones hasta noviembre pasado, lo que equivale a un crecimiento del 15% con respecto al mismo período de 2024.
De acuerdo con datos actualizados de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), las exportaciones totales de bienes sumaron $20.972 millones, liderados por los dispositivos médicos, que significaron el 48% de las ventas de Costa Rica al exterior.
Los dispositivos médicos totalizaron $10.158 millones, un crecimiento del 28% con respecto al período enero-noviembre 2024. El dinamismo de este sector se refleja en un contexto de incertidumbre generado por la investigación por un tema de seguridad nacional que realiza el gobierno de Estados Unidos a las importaciones de estos bienes.
El país norteamericano es el destino del 69% de las exportaciones de los dispositivos médicos producidos en Costa Rica.
Tras los dispositivos médicos se ubican la piña, con un total de $1.214 millones, el banano ($966 millones), jarabes y concentrados para la preparación de bebidas gaseadas ($673 millones) y café oro ($451 millones).
Estos cinco rubros representan el 65% del total de las exportaciones.
El dinamismo exportador llevó a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) a ajustar al alza las previsiones de crecimiento de la economía de Costa Rica para 2025 en un 4%, luego del 3,5% anterior.
Laura López, gerente general de Procomer, indicó que el crecimiento de las exportaciones se sustenta en una diversificación cada vez más amplia de la oferta y de destinos, construida a partir de decisiones empresariales que han permitido ampliar mercados, elevar niveles de sofisticación y responder a demandas internacionales más complejas.
Desde abril pasado, las exportaciones de bienes están afectadas por el arancel impuesto por la administración de Donald Trump a más de 160 socios comerciales, incluido Costa Rica. La tarifa que inició en 10% fue incrementada al 15% desde agosto pasado, bajo argumento del superávit comercial que registra nuestro país frente a los Estados Unidos.
López dijo, por medio de un comunicado de prensa, que esta base diversificada es la que hoy permite sostener el dinamismo exportador y reducir vulnerabilidades en un contexto global marcado por alta incertidumbre.
El gobierno de Estados Unidos suspendió el arancel a los productos agrícolas en noviembre pasado para garantizar el abastecimiento y alzas de precios a sus consumidores.
Ojo al régimen definitivo
Marco Vinicio Ruiz, exjerarca del Ministerio de Comercio Exterior (Comex), destacó que el crecimiento de las exportaciones se sustenta por el dinamismo del régimen de zona franca frente a un régimen definitivo (empresa que pagan impuesto a la renta) que calificó de desfasado y al que corresponde ponerle mucha atención por ser el principal generador de empleos.
Datos de Procomer refieren que al cierre de 2024, el 66% de las exportaciones de bienes fueron generadas por 626 empresas del régimen de zona franca que garantizaron 197.000 empleos directos.
En tanto, el régimen definitivo aportó el 34%, desde 2.216 empresas que generaron 394.000 empleos directos.
Procomer pronostica que 2025 cerrará con un total de exportaciones de $34.232 millones, incluidos bienes y servicios. En similares términos se ubica la previsión de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco) que las estimó en $34.800 millones, lo que representa un 15% de crecimiento con respecto a 2024.
Cadexco registra que las exportaciones de bienes se dirigen a 168 destinos, con más de 4.300 productos.
El 2026
Sobre las previsiones para 2026, Ruiz deseó resultados satisfactorios en las negociaciones comerciales con Estados Unidos, que buscan la suspensión de la tarifa arancelaria y, por otro lado, que el nuevo gobierno revise los factores que afectan el desempeño en las exportaciones del régimen definitivo, principalmente la apreciación del tipo de cambio.
Por otro lado, Ruiz ve con buenos ojos que se continúe diversificando mercados para reducir la dependencia con Estados Unidos.
En analista internacional, Óscar Álvarez Araya, consideró que el año por iniciar es de difícil pronóstico porque estará lleno de incertidumbres en el ámbito político y económico, debido al proceso electoral en Costa Rica y las negociaciones comerciales con Estados Unidos.
Álvarez indicó que a los negociadores costarricenses les tocará demostrar que nuestro país es un aliado democrático y que las exportaciones de dispositivos médicos, ni su sistema económico representan ninguna amenaza para la seguridad nacional estadounidense.
