La mantequilla es el ingrediente fundamental para cualquier pastelero o panadero que busca darle sabor, color y textura a sus productos.
Sin embargo, varios pasteleros declararon a La Nación, que desde hace tres meses están sufriendo una escasez de la mantequilla en el inventario de la Dos Pinos y en varios supermercados, lo que los tiene en apuros.
Por esa situación, se han visto forzados a adquirir otros productos similares para seguir con sus ventas, o bien, han debido pagar casi el doble por otro tipo de mantequilla.
Katherine Solano, vecina de Coronado, es chef pastelera y tiene una pastelería que se llama Gagi Rollitos en Moravia. Junto con su esposo, se dedica a distribuir su repostería en diversas cafeterías alrededor de la Gran Área Metropolitana. Ella contó a este diario que debido a la escasez de la mantequilla de la marca que siempre compran le ha tocado bajar un poco la producción en estos días.
“La mantequilla ha estado agotada ya en varias ocasiones desde hace tres meses y esta es la tercera vez que mi asesor de la Dos Pinos me comunica que sigue agotada y también me ha costado conseguirla en los supermercados, pero esta vez se agrava el asunto porque nuestros bolsillos ya lo están sintiendo.
“La primera vez que estuvo agotada compramos la mantequilla que tenía sal y a la hora de preparar los productos jugábamos con el tema de la receta para hacer algunas variaciones y bajar la cantidad de sal.
“Ahora, es que ya no tienen ni sin sal ni con sal, o sea, no se puede conseguir el tamaño grande de cuatro kilos o 25 kilos, y me ha tocado estar comprando el paquete de cuatro mantequillas en algún supermercado, pero hasta en el supermercado hay escasez de mantequilla.
“En este momento, para hacer tres recetas yo gasto ¢62.400 solo en mantequilla y antes para hacer esa misma cantidad solo gastaba ¢25.000″, detalló Solano.
Pastelería y Repostería Artesanal se encuentra en la misma situación que el negocio de Solano. “Me tocó usar otro tipo de mantequilla, pero a un costo más alto, también me tocó buscar otras opciones sin perder la calidad, pero a mayor costo, menos rentabilidad”, dijo doña Grettel Vanegas, la representante de este local.

Por su parte, Tatiana Chavarría, propietaria de la pastelería By Tati, en Garabito, también dijo que no solo hay problemas con la escasez de la mantequilla, sino con el precio exorbitante de los huevos.
“Con la mantequilla, en nuestro caso utilizamos la mantequilla sin sal de la Dos Pinos que de por sí ya cuenta con un precio elevado y ahora tener que comprarla en un supermercado sale más caro. A veces vamos al Mas x Menos y no hay; a veces tenemos la suerte de encontrar el producto en otro lugar, pero en pocas cantidades.
“Nosotros compramos las cajitas de cuatro barras. En algún momento compramos un bloque de 25 kilos, pero es mucha la inversión, lo que sí está muy caro es el huevo. Hace dos años un cartón con 30 huevos valía ¢2.000 y ahora está en casi ¢5.440 y ha bajado un poco porque llegó a costar casi ¢6.000″, lamentó Chavarría.

Poco lecha disponible
Debido a las quejas por la escasez de mantequilla y leche entera, La Nación consultó a la Cooperativa de Productores de Leche Dos Pinos R. L., para conocer las causas de esa situación. A través de su oficina de prensa, esa organización admitió que se podría percibir una menor disponibilidad de algunos de esos productos lácteos.
Argumentó que la industria lechera afronta un diferencial en la cantidad de leche recibida en la actualidad debido a factores locales e internacionales, por lo que la Dos Pinos no escapó de esta situación, al igual que muchas otras industrias lácteas a nivel mundial.
“Entre los factores que han incidido en la variación de la producción nacional de leche se encuentra un aumento en los precios internacionales de insumos concentrados para animales y productos veterinarios. También incide en esta situación las condiciones climáticas adversas, en especial las condiciones propias de la época seca.
“Gracias a sus previsiones, Dos Pinos garantiza el abastecimiento de sus leches fluidas y en polvo en el mercado; aunque podría percibirse una menor disponibilidad de algunos productos”, explicó la cooperativa en un correo electrónico.
En noviembre del año pasado, esa empresa había atribuido a problemas de logística, algunas dificultades en el abastecimiento de otros productos, como la leche entera.