
Robert Wadlow, el hombre más alto registrado en la historia con 2,72 metros, apareció en una filmación casera inédita de 1933. La grabación fue publicada por el Guinness World Records el viernes 29 de agosto, gracias al aporte de un descendiente de una familia vecina del joven gigante.
La cinta muestra a Wadlow, entonces de 15 años, compartiendo un momento con Patricia Jensen, una niña de 4 años que vivía en su vecindario en Alton, Illinois, Estados Unidos. El encuentro ocurrió el 22 de febrero de 1933, día en que ambos celebraban su cumpleaños.
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El autor del video fue Maurice Williamson, médico de la localidad y abuelo de Bruce Jensen, quien compartió el material. Según explicó Jensen, su abuelo tenía gran interés por la tecnología y adquirió una cámara de cine y un proyector en la década de 1920, con los que solía grabar distintos eventos familiares y comunitarios.
Williamson aprovechó la coincidencia de los cumpleaños para organizar un encuentro entre su hija Patsy y Wadlow. En la grabación en blanco y negro se observa a la niña bajando las escaleras junto al adolescente de estatura extraordinaria. Wadlow se inclina para estrechar la mano de la pequeña y luego la alza con una sonrisa visible durante toda la secuencia.
Más adelante, se ve a Patsy deteniéndose para tomar la mano de Wadlow mientras caminan juntos. Luego, la grabación muestra al joven gigante conversando y saludando al médico, quien lo acompaña en ese momento.
Jensen señaló que su madre, quien pasó toda la infancia en Alton, recordaba con orgullo a Wadlow como una figura amable, carismática y digna. Según relató, la familia hablaba con frecuencia sobre él, aunque sin entrar en detalles específicos sobre sus encuentros.
En otro segmento del video, aparece Wadlow en compañía de sus familiares. Se le observa dando la mano a su padre y cargando en brazos a un bebé, quien sería su hermano menor.
La vida y muerte del hombre más alto del mundo
La historia de Wadlow terminó de forma trágica. Murió mientras dormía a los 22 años, producto de una infección en el tobillo derecho, causada por una cinta ortopédica metálica que utilizaba para estabilizar sus piernas.
El cuerpo de Wadlow, que pesaba 199 kg, fue sepultado en un ataúd de acero de 3,28 metros, con un peso total superior a 453 kg, el cual requirió la ayuda de al menos 16 personas para ser trasladado.
Según narró Bruce Jensen, su familia mantuvo diversos lazos con Wadlow. Su tía abuela Bernice fue profesora de arte del joven durante tres años en la escuela local. Además, comparó la estatura de su propio hijo Kevin, quien mide 1,90 metros, con la de Wadlow, destacando la diferencia de más de 60 cm.
Jensen expresó que siempre le resultó difícil imaginar la experiencia de Wadlow en un entorno donde las miradas sorprendidas eran constantes. Aseguró que lo que lo volvió tan icónico fue su actitud y forma de llevar su vida con dignidad, sin pretensiones.
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*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.