
El origen de la arepa, alimento icónico de América Latina, ha sido objeto de debate durante décadas entre Venezuela y Colombia. No obstante, la antropóloga Beatriz Bermúdez Rothe ha aclarado su procedencia tras analizar evidencia lingüística e histórica relacionada con los pueblos indígenas del continente.
Según la experta, la palabra “arepa” deriva de “erepa”, un término en lengua cumanagota, perteneciente a un pueblo indígena de la costa oriental de lo que hoy es Venezuela. Esta frase significaba “lo que sustenta la vida” y se utilizó en tiempos coloniales para referirse a las tortas de maíz, que eran base de la alimentación indígena.
Los cumanagotos, quienes hablaban una lengua caribe, cultivaban más de diez variedades de maíz y consumían con mayor frecuencia arepas que cazabe. Así, la denominación se extendió por todo el territorio venezolano tras la imposición del castellano y reemplazó otras palabras locales.
La arepa estuvo al borde de desaparecer
El ingeniero y gastrónomo Armando Scannone advirtió en su momento que este alimento casi desaparece en el siglo XX. La razón: su preparación tradicional requería hasta 21 pasos, ya que el proceso comenzaba con el maíz pilado.
Todo cambió en las décadas de 1950 y 1960. El ingeniero Luis Caballero Mejías desarrolló la harina precocida, lo que facilitó la elaboración de las arepas. Este avance permitió su expansión dentro y fuera de Venezuela, consolidándola como emblema de su gastronomía.
¿Venezolana o colombiana?
Bermúdez Rothe sostiene que la arepa tiene un origen netamente venezolano, al estar asociada directamente con una etnia y una palabra de ese territorio. En Venezuela, se convirtió en el plato principal de la dieta diaria y se mantuvo vigente gracias a la diversidad de formas de preparación.
La antropóloga resalta que, debido a sus múltiples nombres e historias, el platillo se adaptó y permaneció presente en los hogares venezolanos, incluso en contextos de migración y crisis.
El secreto de su preparación
Un local especializado en cocina venezolana, llamado Budare, explicó cómo se elabora la arepa de manera tradicional. El proceso básico consiste en formar una masa con agua, sal y harina precocida de maíz. Luego, se cocina por ambos lados hasta obtener una textura firme, sin que sea demasiado gruesa.
Los rellenos varían según el tipo. Dos de los más conocidos son:
- La Catira: lleva pollo desmenuzado y queso derretido. El pollo se cocina durante 30 minutos con agua, ajo, orégano, cebolla en polvo, sal, laurel y cilantro. Luego se desmenuza para conservar una textura húmeda.
- La Llanera: contiene carne de corte plano (similar al skirt steak), queso y una salsa típica venezolana conocida como Guasacaca.
Estas combinaciones han convertido a la arepa en un platillo versátil, apto para el desayuno, almuerzo o cena, y adaptable a diversos contextos culturales.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
