Un grupo de vecinos de barrio Amón impugnó, ante la Sala Constitucional, la demolición de los muros de una propiedad del Instituto Nacional de Seguros (INS), ubicada al costado oeste del edificio principal de la entidad, la cual sirve de parqueo. Los recurrentes consideran que las paredes tienen un valor patrimonial.
“Son varias edificaciones históricas que forman parte del patrimonio cultural del país, ubicadas en San José, las cuales han sido demolidas por el INS, que ha manifestado su deseo de continuar con la demolición de la fachada histórica”, señala el recurso de amparo 24-010738-0007-CO.
Pese a su valor histórico, los muros no tienen declaratoria de patrimonio. En marzo pasado, el INS adjudicó la remodelación y ampliación del estacionamiento y determinó que los muros, pese a su belleza, no están en buenas condiciones.
Al no tener una declaratoria de valor histórico y arquitectónico, no existe obligación legal de restaurar.
“Las paredes de este parqueo se encuentran en muy mal estado, presentan fisuras y tienen barras de refuerzo de tipo torsionado, lo que compromete la integridad de la estructura. Las paredes funcionan como arriostre, lo que genera pérdida de estabilidad y riesgo de caída. Podría generar situaciones de peligro para quienes transitan por esta zona”, detalló el INS en una respuesta enviada a La Nación.
El 6 de mayo anterior, el INS le dijo a la organización de vecinos que frenaría los trabajos mientras esperaba la resolución de la Sala.
Zona de valor patrimonial
Para Diego Meléndez, exdirector del Centro de Patrimonio Cultural y una de las personas que lucha contra la demolición de los muros, la zona donde se encuentran el INS y este parqueo es un circuito lleno de valor histórico y arquitectónico.
“Ese tejido histórico tan denso es de enorme valor patrimonial. Está acompañado por muchas otras construcciones históricas valiosas que, con o sin declaratoria patrimonial, definen un paisaje urbano típico de principios del siglo XX.
“Ese ‘paisaje cultural’ tan emblemático merece ser conservado si queremos mantener el carácter histórico del barrio. De hecho, se está aprobando una ley en la Asamblea Legislativa en este momento para declarar a barrio Amón como zona de interés público para promover la inversión en su recuperación, restauración, conservación y puesta en valor”, explicó Meléndez en un escrito.
En su respuesta, el INS argumentó que destina esfuerzos a la restauración de sus edificaciones patrimoniales. Entre los ejemplos de restauración, mencionó el edificio La Merced, en el que invirtió $2,4 millones en el 2020. También, se contrató la pintura de ese edificio este año por ¢90 millones.
Otro ejemplo, señaló el Instituto, es la sucursal de Cartago, en el que se realizará un mantenimiento integral este año, que ya cuenta con aprobación del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural. Según informó, el proyecto costará ¢207 millones.
Otras informaciones sobre patrimonio histórico y arquitectónico
¿Qué significa y qué implica que un edificio sea patrimonio histórico y arquitectónico?
Antiguo templo de Puriscal renacerá como ruina patrimonial
Prohibido paso de carga pesada sobre el puente de piedra en Grecia por su valor patrimonial
Conozca los dos edificios patrimoniales que serán rescatados del deterioro
UCR traslada la esfera precolombina más grande de San José a un lugar más visible
Siete edificios históricos entran a lista de patrimonio arquitectónico de Costa Rica
Costa Rica repatrió 395 piezas precolombinas recuperadas en Estados Unidos