El cantón de Curridabat fue anunciado la tarde de este martes como la ciudad ganadora de una de las categorías del premio Wellbeing Cities 2020.
Este galardón se le otorga a ciudades que buscan el bienestar de los habitantes en un entorno amigable con el medio ambiente. Es otorgado por una organización internacional que impulsa espacios amigables para el desarrollo y el bienestar de personas de todas las edades.
La ciudad costarricense ganó en la categoría “Priorizar el bienestar de los habitantes”. En ella compitió contra Edimburgo y Glasgow en Reino Unido y contra Tirana, en Albania.
Curridabat fue seleccionada por los distintos proyectos de la iniciativa “Ciudad Dulce”, que busca mejorar, a través de distintas actividades, la relación con el medio ambiente, entre estos, estudios de biodiversidad, espacio a los polinizadores en los parques de la ciudad, inventario de plantas en cada parque público y proyectos de investigación sobre la calidad de agua y la recuperación de zonas verdes.
“La iniciativa Ciudad Dulce acerca al desarrollo de la ciudad de una forma en que se da una relación balanceada entre la naturaleza y los miembros de la comunidad”, cita la página de Internet del premio.
“La visión de Ciudad Dulce reconoce a los polinizadores (especialmente a las abejas) de ser los guardianes de las plantes, árboles y la tierra y por ello son el centro del diseño urbano. (...) Según esta visión los desarrollos urbanos, las actividades y los eventos contribuyen a hacer realidad que esta sea una ciudad dulce”, añade.
Otras ciudades premiadas
Otra de las categorías del reconocimiento premió a la ciudad que mejor construyera una “economía vibrante”, esta fue ganada por Curitiba, en Brasil.
Por su parte, Burdeos, en Francia, fue galardonada como el lugar con mejor espacio a la naturaleza y biodiversidad.
Buenos Aires, en Argentina, recibió el premio a la ciudad con mejor salud urbana.
Finalmente, Nueva York, en Estados Unidos, fue electa como la de mejor marco de sociedades cohesivas, donde diferentes comunidades y diferentes culturas tienen los espacios y herramientas para sentirse incluidas y conviven entre sí.
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