
Nueva York, Estados Unidos. Un juez bloqueó, este martes 25 de marzo, la orden del gobierno de Donald Trump para detener y deportar a una estudiante universitaria que participó en manifestaciones propalestinas, lo que muchos consideran un intento de amordazar la libertad de expresión.
Las autoridades intentaron arrestar a Yunseo Chung, una estudiante surcoreana de 21 años y residente permanente en Estados Unidos.
Para ello, aplicaron los mismos poderes utilizados para detener, a principios de mes, a Mahmoud Khalil, un alumno de posgrado de Columbia que actualmente enfrenta una orden de deportación a pesar de contar con residencia legal en el país.
A ambos se les acusa de “socavar la política exterior de Estados Unidos”, lo que permite al secretario de Estado ordenar la expulsión de extranjeros.
Chung, cuyo paradero sigue sin conocerse, presentó el lunes una demanda contra el gobierno estadounidense.
Alegó que “la aplicación de las leyes de inmigración, en este caso la detención y amenaza de deportación, no pueden usarse como herramienta para castigar a oradores no ciudadanos que expresan opiniones políticas que desagradan a la Administración”.
Según sus abogados, el Departamento de Seguridad Pública de Columbia la contactó para informarle de que agentes de Seguridad Nacional intentaban arrestarla.
Durante una audiencia, el martes, la jueza Naomi Buchwald ordenó al gobierno frenar sus intentos de expulsar a Chung.
“Se prohíbe a los demandados detener a la demandante mientras este tribunal no emita una nueva orden”, dictaminó en su fallo.
En un movimiento paralelo, varios profesores universitarios demandaron a la administración Trump, este martes.
Aseguran que su política contra los estudiantes extranjeros es ilegal.
“La política impide o dificulta que ciudadanos estadounidenses escuchen a sus estudiantes y colegas extranjeros y se reúnan con ellos”, afirman en la demanda.
Los críticos aseguran que la campaña del gobierno de Trump busca intimidar a quienes expresan opiniones contrarias a su política exterior.
Por otro lado, sus partidarios afirman que pretende restablecer el orden en las universidades.