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La Carrera al Cero, o Race to Zero, es una iniciativa de las Naciones Unidas que reúne a diferentes sectores de la sociedad con el objetivo de reducir las emisiones netas de carbono a 0 para el año 2050, lo anterior a través de procesos de descarbonización que reduzcan el impacto del cambio climático y así mejorar la salud ambiental pública.
Cabe resaltar que, en el ámbito hospitalario, el Hospital Clínica Bíblica es uno de los 60 hospitales fundadores de esta campaña, único en Centroamérica, y uno de los 18 en Latinoamérica; proceso desarrollado en conjunto con la Red Global de Hospitales Verdes y Saludables.
Conscientes de esta situación el Hospital Clínica Bíblica inició su participación en esta campaña, la cual presenta retos importantes en materia de descarbonización y análisis de riesgos a nivel climático, temas cada vez más relevantes dentro del ámbito empresarial.
“La sostenibilidad forma parte de nuestros valores y estrategia corporativa ESG cuyas siglas en inglés están relacionadas con acciones a nivel ambiental, social y de gobernanza en nuestra organización, que, además, nos permite orientar nuestro accionar en integración con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, así como mantener un buen desempeño operativo cumpliendo con la misión y visión de nuestro hospital”.
— Ing. Andrés Alvarado, Gerente de Calidad y Ambiente de Hospital Clínica Bíblica.
De esta forma, el Hospital Clínica Bíblica también acompaña y apoya la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en Costa Rica. Reafirma así el compromiso por alcanzar el ODS #7: Energía asequible y no contaminante; y el ODS #13: Acción por el Clima.
Más acciones
El Programa de Carbono Neutralidad del Hospital Clínica Bíblica tiene más de 10 años, sin embargo, a partir de 2023, se ha incorporado emisiones de la cadena de valor, en particular las relacionadas con la disposición de desechos comunes.
“Además, contamos con un plan hacia el año 2025, para determinar las emisiones asociadas con el tratamiento de residuos especiales, así como la huella asociada con el transporte de nuestros colaboradores y profesionales de la salud. También la determinación de la huella por el uso de inhaladores por parte de nuestros pacientes, ésta última que ha sido objeto de análisis en el sector hospitalario”, agregó el gerente.
Algunas de las acciones que ha emprendido el Hospital Clínica Bíblica, ya por más de 12 años, han sido:
- El uso racional de la energía.
- Uso de paneles solares y fotovoltaicos.
- Uso de agua de lluvia.
- Separación y tratamiento adecuado de residuos.
- Procesos de compostaje.
- Educación ambiental comunitaria.
A su vez, se están incorporando otras acciones relacionadas con el uso de gases refrigerantes y gases de anestesia en salas de cirugía.
“Hemos analizado, por ejemplo, el uso de gases de anestesia en hospitales de Brasil, Australia y Nueva Zelanda, lo que nos muestra que sí es factible reducir nuestra huella de carbono en estos procesos y a la vez mantener los niveles de calidad y seguridad que requieren nuestros pacientes, siendo fundamental la participación de nuestros colaboradores para lograr estos objetivos”, expuso Alvarado.
Para
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