Honduras tiene un rincón que sobrepasa el nivel de lo que llamamos bello, donde el cielo parece jugar con colores espectaculares durante el atardecer, el sol es parte del menú diario y la calidez de sus habitantes es sorprendente.
Se trata, quizás, del lugar más encantador de Honduras, donde los visitantes quedan boquiabiertos ante la belleza natural que lo rodea.
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Aunque Honduras cuenta con muchas otras joyas turísticas, esta isla destaca como uno de los destinos más bellos de toda Centroamérica.
Roatán es la paradisíaca isla del Caribe catracho.

Esta isla ofrece un sinfín de actividades para quienes la visitan. Probablemente alberga las mejores playas de Honduras y, además, es un destino considerado muy seguro para los turistas.
Tuve la oportunidad de conocerla durante un crucero, aunque también se puede llegar en avión. La infraestructura turística es excelente: hoteles, transporte, tours y gastronomía están a la altura de un destino internacional.
Una visita obligada es West Bay Beach, una playa de arena blanca y aguas cristalinas, ideal para nadar, relajarse y practicar snorkel en un arrecife cercano.

Otra joya es Half Moon Bay, ubicada en el sector de West End, donde se puede practicar snorkel desde la orilla y disfrutar de un ambiente relajado con bares, música y restaurantes junto al mar.
Si prefiere el contacto con la naturaleza, le encantará el parque ecológico Gumbalimba, donde podrá ver monos capuchinos, guacamayas, cruzar puentes colgantes y caminar entre jardines botánicos.
También puede visitar el Santuario de Monos y Perezosos de Daniel Johnson, un lugar donde estos animales viven bajo cuidado y protección.
La isla también ofrece sabores típicos como la deliciosa sopa de caracol, y si busca una dosis de adrenalina, puede lanzarse en un canopy entre la exuberante vegetación tropical.


¿Cuándo visitar Roatán?
La mejor época para viajar a Roatán es entre febrero y mayo, cuando el clima es seco, soleado y perfecto para disfrutar del mar y las actividades al aire libre.
Estos meses ofrecen condiciones ideales para el snorkel y el buceo, ya que las aguas son especialmente claras y tranquilas.


Aunque la temporada alta va de diciembre a abril —con más visitantes y precios un poco más elevados—, es entre febrero y mayo cuando se logra un equilibrio perfecto entre buen clima y menos multitudes.
Intente evitar los meses de setiembre a noviembre, ya que es cuando hay más lluvias y riesgo de tormentas tropicales en la región



