Artículo de opinión. El fútbol alegre de Alajuelense resulta contagioso y si hay que señalar a alguien, en este caso le podemos achacar la culpa total a Andrés Carevic.
LO ÚLTIMO
Mario Gerardo Vindas es el aficionado no vidente de Alajuelense que estaba muy ansioso por regresar al Morera Soto. Él disfrutó al máximo el partido entre la Liga y San Carlos.
Socios con voz y voto de Alajuelense que militan en la ASLL niegan haberle dado adhesión a ningún grupo aspirante a puestos en la Junta Directiva y señalan que “poco ganaremos si nos centramos en destruir, sea de un lado o del otro”.