Dos años después de finalizada la crisis, la industria de los fondos de inversión inmobiliaria permanece sin recuperar el terreno perdido durante ese periodo y apenas da señales de una leve recuperación en sus rendimientos y la ocupación de sus inmuebles.
Pese a que no sufrieron un golpe fulminante, los fondos inmobiliarios sí vieron mermado el impulso con el crecieron antes del 2009 y sufrieron la ralentización de algunos de sus indicadores, situación que les restó atractivo por un tiempo.
Para Álvaro Camacho, gerente de BCR SAFI, la leve mejoría se explica, en parte, por el rezago con el que se sintieron en el país los efectos de la crisis, y por la contracción que también hubo en la actividad de la construcción.
“Esto hace que los rendimientos en términos generales estén mejor, aunque sin repuntar de manera importante todavía, dado que los fondos de inversión se ajustan a las condiciones de mercado con cierto rezago”, comentó Camacho.
Esta diferencia en los plazos es producto de la composición de las carteras de los fondos, que en este caso son contratos de arrendamiento y que normalmente se ajustan en el largo plazo, motivo por el cual los cambios no se reflejan de manera inmediata.
Empero, Camacho aseguró que desde el segundo semestre del año pasado el sector percibe una actividad inmobiliaria más dinámica.
Esta opinión es apoyada por Carlos Meléndez, quien se desempeña como gerente de comercialización de Interbolsa SAF, pues indicó que este intermediario ha mejorado la ocupación de las propiedades y retomó el incremento en los alquileres porque durante la crisis no hubo cambios.
Al comparar los informes de la industria, elaborados por Sugeval con corte a abril, el sector da señales incipientes de crecimiento en los rendimientos líquidos (que pasan del 7,6% al 7,8%) y la ocupación de los inmuebles, que supera levemente el nivel al que llegaron en la crisis (91%) y se ubica ahora en el 91,38%.
Meléndez explicó que esto se debe a que muchos de los inmuebles en los fondos han presentado minusvalías en su valoración. Esta situación es calificada como “normal” por el analista, en tiempo de poca demanda de oficinas.
Otro factor que incide sobre el resultado son las compras de inmuebles pues las administradores emiten participaciones y se diluyen así las ganancias.