Descifrar el futuro laboral: ¿qué tipo de empleos y habilidades se buscan?

En un mundo marcado por tensiones geopolíticas, los efectos de la pandemia por COVID-19 y los cambios constantes, las empresas se encuentran en la encrucijada de importantes transformaciones, según revela la Encuesta sobre el Futuro de los Trabajos, elaborada por el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), que consultó a 803 compañías empleadoras de más de 11.3 millones de trabajadores en 45 economías y 27 sectores industriales.

Este análisis abarca macrotendencias, tecnologías emergentes, estrategias de transformación y proyecciones de empleo para el periodo comprendido entre 2023 y 2027.

Empleos más verdes. Entre las macrotendencias destacadas, las inversiones destinadas a la transición verde de las empresas, la aplicación generalizada de estándares Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG), y la localización de cadenas de suministro se vislumbran como impulsores clave de creación neta de empleo. La adaptación al cambio climático y el dividendo demográfico en economías en desarrollo también se perfilan como generadores de empleo.

En contraste, desafíos como el crecimiento económico lento, la escasez de suministros y el aumento del costo de vida para los consumidores se sitúan como los principales impulsores de la destrucción neta de empleo. Además, las divisiones geopolíticas y el continuo impacto de la pandemia de COVID-19 generan una incertidumbre equitativa entre los empleadores.

Pese a estos obstáculos del entorno, la adopción tecnológica sigue siendo motor de transformación empresarial. La adopción de tecnologías emergentes se revela como un factor crucial para la transformación empresarial. El manejo de Big Data, computación en la nube e inteligencia artificial proyectan un aumento significativo en roles digitalmente habilitados, como especialistas en comercio electrónico, expertos en transformación digital y especialistas en marketing y estrategia digital, con un pronóstico de crecimiento de alrededor de 4 millones de empleos.

Habilidades clave para los trabajadores del futuro: En este entorno dinámico, ciertas habilidades emergen como fundamentales para los trabajadores. El pensamiento analítico y creativo se mantienen en la cima de la lista, identificados como las habilidades más importantes por las empresas. El pensamiento analítico constituye, en promedio, el 9% de las habilidades fundamentales, y el pensamiento creativo sigue de cerca, destacando la necesidad de la capacidad de adaptación en entornos laborales disruptivos.

Junto con estas habilidades cognitivas, la encuesta del WEF destaca tres habilidades cruciales: resiliencia, flexibilidad y agilidad; motivación y autoconciencia; y curiosidad y aprendizaje de por vida. Estas competencias subrayan la importancia de la adaptabilidad y la autenticidad en un mundo laboral en constante cambio.

No todo es un título y dominio de los aparatos tecnológicos: La formación en las áreas descritas y la importancia de comprender y utilizar tecnologías emergentes van de la mano con dos actitudes relacionadas con el trabajo en equipo: empatía y escucha activa, y liderazgo e influencia social, así como el control de calidad.

Áreas de crecimiento. El análisis de proyecciones de empleo señala un crecimiento significativo en sectores específicos. La educación experimentará un aumento del 10%, generando alrededor de 3 millones de empleos adicionales, con un enfoque en profesores de educación vocacional y de educación superior. En la agricultura, se espera un incremento del 30%, creando 3 millones de empleos adicionales, especialmente para operadores de equipos agrícolas.

Por último, el comercio digital y electrónico se perfila como un sector clave, con alrededor de 4 millones de empleos digitalmente habilitados, como especialistas en comercio electrónico y expertos en transformación digital.

A medida que las empresas navegan por estas macrotendencias y se adaptan a la transformación tecnológica, queda claro que los trabajadores deben cultivar un conjunto diverso de habilidades que abarquen desde la cognición hasta las habilidades técnicas y sociales. La capacidad de adaptarse, aprender continuamente y trabajar de manera colaborativa se vuelve esencial en un entorno laboral que evoluciona rápidamente.

La colaboración entre empresas, gobiernos y educadores se presenta como un enfoque crucial para abordar estos desafíos y preparar a las personas más jóvenes para el futuro del trabajo. La adopción de tecnologías emergentes, la atención a las habilidades clave y la promoción de un entorno laboral resiliente se erigen como estrategias fundamentales para impulsar el éxito en el cambiante escenario laboral de los próximos años.

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