En noviembre del 2017, Randall Vargas, presentador de Teletica y director deportivo de TDMás, fue internado tras sufrir una trombosis cerebral.
Antes de su hospitalización, él vivió días muy duros con incesantes dolores de cabeza. Randall logró estabilizarse, así como lo ha hecho a lo largo de los últimos 18 años, cuando le diagnosticaron esclerosis sistémica progresiva, lupus sistémico y artritis reumatoide. Al salir del centro médico un padecimiento se sumó a la ya conocida tríada: el síndrome antifosfolípidos.
Randall convive con sus padecimientos que esporádicamente le provocan dolores y la sensación de molestos ruidos, pero para su bien, cuenta que actualmente vive su mejor estado de salud.
Vargas, un apasionado por el deporte, la música y la comunicación nunca ha permitido que sus padecimientos detengan sus proyectos; ahora, que se siente tan bien, está disfrutando su nueva creación: Rock N' Wine, un espacio que se pasa por TDMás 2 y la app de TDMás, todos los viernes a las 8 p. m., y en el que presenta historias y anécdotas del rock.
En este espacio, Randall mezcla su pasión por la música, que suma más de tres décadas, y el gusto por el vino, bebida de la que también habla en su programa de más de hora y media.
En entrevista, Randall Vargas, de 47 años, habló de su estado de salud, de su familia, de cómo ha vivido la pandemia y del optimismo que le acompaña todos los días en los que disfruta de jugar golf a salir en bicicleta.
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—Hablemos de su nuevo proyecto, ¿cómo es que Rock N' Wine ve la luz?
—Nació en una conferencia con René Picado Jr, Gabriel Chacón (director administrativo del canal) y yo cuando todos los eventos y las transmisiones deportivas que tanto hacemos nosotros estaba suspendidas. Estábamos viendo qué inventábamos en torno a esto. Así nació la idea de que se hiciera algo en el bar de mi casa, que a mis compañeros les gusta muchísimo, dicen que es el set más chiva del canal; ellos dijeron que iban a enviarme un equipo para que yo armara algo, ya que soy tan fiebre de la música y de los vinos, y que me contara una historia, que hiciera programa similares a los que hago en Zoom Radio pero contado en video. Hicimos un demo con The Wall de Pink Floyd y fue un exitazo. A partir de ahí hablé con Universal Music y otra gente y todas las semanas grabo dos programas que quedan ahí.
“Hoy (viernes 25 de setiembre) estrenamos un programa dedicado al poder femenino del rock."
—¿Cómo ha estado, cómo está su salud, pues es sabido que son padecimientos complicados?
—A veces se ponen medio complicados. Pero bien. Trato de no hacerle mucho caso a dolores y cosas. Trato de llevar la vida lo más relajada posible dentro de lo que cabe. Y ponerme mis propios desafíos, llevar vida normal con la familia, andar en bici, la he agarrado más fuerte con el golf. Todas esas cosas me hacen sentir más vivo que nunca.
"Después de aquella trombosis que venía muy mal de la cabeza, pudimos controlarlo. A veces aparecen esporádicamente dolores y ruido que uno tiene constantemente en la cabeza. He podido controlarlo muchísimo. Ya no es tan periódico como lo fue.
"Los tratamientos han funcionado muy bien. Haber caído esa semana en el hospital y encontrar todos esos especialistas en el San Juan de DIos me permitió nuevas formas para tratarme. Estoy pendiente con los médicos. En estos tiempos de pandemia no es buena idea ir mucho al hospital. Tengo tratamiento para cuidarme por mi propia cuenta.
"Las cosas han mejorado montones. Después de ese episodio, cuando encontraron problema en la sangre (el síndrome antifosfolípidos) que provocaba los coágulos, ya con los anticoagulantes he mejorado montones”.
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—Cómo ha estado de los dolores, recuerdo que una vez dijo que en la escala del 1 al 10 a veces usted llegaba a un 11 en el umbral del dolor…
—Exacto (risas). Eso era increíble. Estoy mucho mejor. Hay momentos en los que si hago un poco más de loco, o ando más en bici o estoy más estresado de la cuenta, entonces uno tiende a tener episodios inflamatorios que están a la orden del día con una enfermedad de estas. Pero uno ya las sabe llevar y va quitándole protagonismo.
"Pero los dolores aquellos famosos de la cabeza y todo eso que me habían dejado tan marcado ya quedaron en el olvido. Ese fue un episodio muy duro. Son tres años de estar con una vida muy normal”.
—Habla de una vida más normal después de aquel episodio. ¿Cómo es ahora?
—Tengo más tranquilidad, disfruto más todo. Si antes disfrutaba mucho, ahora con más razón. Ahora bajaron los dolores considerablemente, lo que hay son molestias propias de la enfermedad que están ahí, pero en comparación a lo que se vivió hace tres años son nada. Son molestias típicas de los problemillas esos que están ahí.
—Usted habla en positivo, ¿la actitud ayuda?
—Esa es la clave, o si no me hubiera jodido desde hace tiempo. La actitud la tengo desde 2002 cuando me diagnosticaron; con cada cuadro nuevo, con cada episodio, con cada cosa que sucedió en algún momento de este problemilla la actitud siempre fue enfrentar todo con buen rostro. Ni qué decir de cuando estoy al lado de mis dos babys (Matías, de 11 años, y Elías, de 3) y de mi esposa (Angélica Rojas).
"En el trabajo estoy muy bien, entienden cuáles son mis condiciones, me dan muchísimas facilidades y me permiten desarrollar proyectos sin necesidad de estar ahí todo el tiempo, poder desarrollar objetivos que quiero sacar adelante para llevarlo de la mejor forma. Todo eso colabora con el estilo de vida, es importante el estilo de vida para sobrellevar este problemilla que tanta disciplina conlleva”.
—¿Cómo le ha ido en estos tiempos de pandemia? ¿Qué sentimientos tiene? ¿Qué ha aprendido?
—Lo que más valoro es el hecho de estar en casa con mi familia. Eso me encanta.
"Siempre tenés que ver los lados más positivos. Tenemos espacio suficiente para estar trabajando y estudiando y a la vez estar conviviendo. Podemos desayunar y almorzar todos juntos, eso me ha gustado dentro de lo negativo.
"Ahorita los chicos están de vacaciones, pero generalmente Matías está con su computadora recibiendo clases, y yo acompaño, de 9 a 10 a. m., a Elías en sus clases de prekinder, hasta hacemos manualidades.
"Gracias a Dios en estos tiempos mi esposa sigue a full con el trabajo. No hemos dejado de producir. Ni de andar en carreras”.