El 14 de setiembre del 2025 quedará grabado en la historia de la televisión mundial: Owen Cooper, con apenas 15 años, se convirtió en el actor más joven en recibir un premio Emmy. Lo hizo por su trabajo en Adolescencia, la miniserie británica de Netflix que ha sacudido tanto a la crítica como a la audiencia internacional.
Pero detrás de los flashes y la estatuilla dorada, ¿quién es este joven que hoy habita en el universo de las leyendas prematuras de Hollywood?

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De Warrington al mundo
Cooper nació en Warrington, Inglaterra, el 5 de diciembre de 2009. Hijo de Andy y Noreen Cooper, creció junto a sus dos hermanos en un entorno familiar donde ninguno de sus padres ni familiares cercanos trabajaba en el mundo del espectáculo. Su madre es cuidadora y su padre trabaja en el sector tecnológico
Su infancia apuntaba hacia el deporte: formó parte del equipo sub-15 del Warrington Rylands y soñaba con una carrera en el fútbol.
Sin embargo, el arte se cruzó en su camino de manera inesperada. Tenía 11 años cuando vio Lo imposible (2012), aquella cinta en la que Tom Holland encarnaba a un adolescente atrapado en la tragedia del tsunami de 2004.
Cooper ha relatado en entrevistas que esa actuación fue un golpe de revelación: entendió que podía contar una historia habitando otro cuerpo, otra alma. Y fue entonces cuando supo que quería intentarlo.
Ese deseo lo llevó a pedir a sus padres clases de teatro como un pasatiempo paralelo al deporte. Así ingresó en la academia The Drama MOB, en Manchester, donde sus maestros pronto reconocieron la frescura y la intimidad de su expresión.
En poco tiempo, la actuación dejó de ser pasatiempo para convertirse en vocación. El balón cedió su lugar al escenario y Cooper abrazó el arte de la interpretación con la misma disciplina con la que antes entrenaba en el campo.

De Owen a Jamie
Su salto a la pantalla fue tan contundente como fulgurante. Adolescencia, dirigida por Philip Barantini, buscaba a un rostro nuevo, sin experiencia previa en cine o televisión, capaz de encarnar la vulnerabilidad adolescente de manera auténtica y conmovedora.
Los directores de casting encontraron a Cooper en The Drama MOB y quedaron prendados de su autenticidad.
La elección fue un riesgo: el joven competía contra intérpretes con mayor trayectoria. Sin embargo, su honestidad emocional, como subrayó la productora, fue definitiva para ganarse el papel de Jamie Miller, un chico de 13 años atrapado en una espiral de violencia, incomprensión y soledad.
El riesgo se convirtió en hallazgo. Con apenas una actuación en su haber, Cooper estremeció a la crítica, tocó fibras sensibles en el público y catapultó a Adolescencia, estrenada en marzo de 2025, a cifras históricas en la plataforma.
La serie que incomoda y duele
Más que una ficción televisiva, Adolescencia es un espejo incómodo que refleja las sombras de la juventud contemporánea.
A lo largo de cuatro episodios, la producción plantea un dilema no sobre la autoría de un crimen, sino sobre las causas que lo generan.
La trama arranca con una escena devastadora: Jamie apuñala a su compañera Katie Leonard en plena calle. El misterio no gira en torno al qué o al cómo, sino al por qué.
La narrativa de Adolescencia aborda temas dolorosamente actuales. Explora la masculinidad frágil y la presión social que enfrentan los adolescentes, así como la intoxicación de las redes sociales, donde el contenido misógino y los mensajes de odio y rechazo ejercen un impacto profundo.
La serie también muestra el bullying, la influencia de la subcultura incel (célibes involuntarios), la humillación escolar y las etiquetas que erosionan la autoestima. Al mismo tiempo, se refleja el impacto de la familia, con padres que transitan entre la culpa, el desconcierto y la impotencia frente a la difícil realidad de su hijo.
El desenlace es oscuro: ninguna vida queda intacta, y la serie parece clamar que la tragedia pudo haberse evitado con más diálogo, escucha y cuidado.
No es solo un drama psicológico y social, sino también una radiografía urgente de una generación.

Un fenómeno global
El éxito fue inmediato y arrollador. En tan solo tres semanas desde su estreno, Adolescencia acumuló 96,7 millones de visualizaciones en todo el mundo. En la quinta semana alcanzó los 124 millones y, finalmente, con 142,6 millones de reproducciones, escaló al segundo lugar de las series en inglés más vistas en la historia de Netflix, solo detrás de Merlina (Wednesday).
La crítica internacional aplaudió la interpretación de Cooper, describiéndola como una actuación de una vulnerabilidad inquietante. Ese registro fue el que lo llevó al Emmy como Mejor Actor de Reparto en una Serie Limitada, Antológica o Película para Televisión, un reconocimiento que nunca antes había recaído en un adolescente.
Al recibir su galardón, en la edición número 77 de los Premios Emmy, Cooper subió al escenario con una sinceridad que conmovió al auditorio.
“Creo que esto prueba que si escuchas, te concentras y sales de tu zona de confort, puedes conseguir todo en la vida”, expresó.
Su discurso no fue una promesa vacía, sino el testimonio de una carrera que apenas comienza. En él se percibe la delicada certeza de que, a pesar de su juventud, Cooper ya ha dejado una huella.
Otros reconocimientos a ‘Adolescencia’
La miniserie de Netflix no solo marcó un hito con la actuación de Cooper, sino que también destacó al resto de su elenco y equipo creativo en los Premios Emmy.
Stephen Graham, co-creador de la serie y padre de Jamie en la ficción, se llevó el premio a mejor actor principal en una Serie Limitada o Película para Televisión. Por su parte, Erin Doherty fue reconocida como mejor actriz de reparto por su papel de Briony Ariston (la psicóloga).

La serie también recibió galardones por mejor dirección y mejor guion por el episodio 3. Con estos logros, Adolescencia se consolidó como una de las producciones más aclamadas del año en la televisión internacional.
Vea el tráiler de Adolescencia aquí:
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