Una mejoría en las notas de matemáticas de los niños de primaria y mayor destreza en la resolución de conflictos son algunos de los frutos que ha dejado el programa diseñado por el Colegio Miravalle, en Cartago, a partir de herramientas de Oracle Academy, para enseñar a los alumnos destrezas en programación.
Ahora, tras la firma de un convenio, ambas instituciones planean expandirlo a otros 23 centros educativos del país y capacitar a más de 150 maestros en tecnologías como: inteligencia artificial, machine learning, bases de datos y todo lo relacionado con la nube.
Según explicó el director de ese centro de enseñanza, Ihosvany Seguí Coto, desde enero de este año se imparten clases de programación a todos los estudiantes desde preescolar hasta quinto de secundaria.
Seguí explicó que, desde el 2017 empezaron a investigar para hacer una migración de currículo por objetivos a uno por competencias, el cual potencia las habilidades digitales y el aprender a aprender.
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“Queríamos que los niños dejaran de ser simples usuarios de las computadoras, para que se convirtieran en creadores de software”, manifestó el director. Quien agregó que como parte de la investigación que realizaron dieron con un informe que aseguraba que el 65% de los empleos a los que ellos se van a enfrentar todavía no existen.
Por ello, dotarlos de este conocimiento es darles una herramienta a niños y jóvenes para que aprendan a aprender, manifestó Seguí.
“Lo que estamos haciendo es llevando un programa que es estratégico de Oracle, que es global y se llama Oracle Academy, a otras instituciones, para tener un alcance mayor y lograr impactar alrededor de 5.000 niños y jóvenes”, explicó Leandro Ramírez, Gerente General de Oracle Centroamérica.
Los niños aprendieron Java, un lenguaje de programación que es utilizado en más de 3.000 millones de dispositivos móviles en el mundo y obtendrán la certificación de programador en Java, conocida como Junior Java Certification, antes de terminar el colegio.
El aprendizaje de programación se permeó a otras asignaturas como matemáticas, español, inglés, música, educación física o geografía.
Evelyn Ramírez, profesora de informática y programación del Colegio Miravalle, ve muy positivos los resultados.
“Los estudiantes en clase de programación han logrado interiorizar la importancia del autoaprendizaje, además de la experiencia de asumir retos para ir más allá y poder desarrollar proyectos maravillosos. Asimismo, les permite interactuar entre ellos, tener clases más dinámicas, atractivas y provechosas, al punto que muchos quieren que la clase no termine”, agregó la educadora.
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¿Cómo planean extender la iniciativa a otros centros educativos? El director del Colegio Miravalle aseguró que los centros educativos interesados pueden contactarlos por medio del correo electrónico: info@colegiomiravalle.com.
El director Seguí hizo un llamado a profesores de instituciones públicas que también estén interesados y aseguró que tienen capacidad para recibir hasta 81 docentes a la vez y compartirles experiencias sobre el programa que han desarrollado.
Además, concluyó que la idea es compartir la visión y lograr niños más competitivos a nivel mundial y centroamericano.