Una mujer nicaragüense habría utilizado una solicitud de renovación de refugio falsa para entrar al país, el pasado domingo en el cantón fronterizo de La Cruz, Guanacaste.
La Policía de Fronteras detuvo, durante un control de carreteras frente a la escuela de la comunidad de San Dimas, un vehículo en el que viajaba la mujer junto con un conductor costarricense. Al solicitarle documentación a la extranjera, ella entregó lo que supuestamente era una cita de solicitud de renovación de refugio.
Durante la inspección, los ocupantes del vehículo dijeron que se dirigían de La Libertad hacia San Dimas, a unos cinco kilómetros del cordón fronterizo.
Los agentes policiales, ante las sospechas que les suscitó el documento presentado por la nicaragüense, coordinaron con personal de Migración para investigar con más detalle el caso. De esta forma, encontraron que se trataba de un documento falso, pues no existía en los archivos de la Dirección General de Migración ningún expediente a nombre de esa persona.
La Policía de Fronteras consultó sobre el caso a la Fiscalía de Liberia, la cual ordenó detener a la nicaragüense y remitirla a dicha instancia judicial, donde podría ser procesada por el presunto delito de uso de documento falso.
Incidente similar se presentó en marzo
El pasado 5 de marzo se registró un caso similar, también en el cantón de La Cruz, cuando miembros de la Policía de Fronteras abordaron a un grupo de nicaragüenses, todos con documentos migratorios al día, excepto uno de apellido Reyes.
Este hombre portaba una supuesta cita para un trámite de refugio, la cual había sido alterada, pues el número de la cita correspondía al trámite de una mujer también nicaragüense, quien sí estaba en proceso de solicitar refugio.
Tras recibir la dirección funcional del fiscal de Liberia, el sospechoso fue detenido y puesto a disposición de la Fiscalía.
Autoridades aseguran que migrantes son víctimas de delincuentes
En otros casos, los detenidos en situaciones similares dijeron que, en territorio nicaragüense, desconocidos les vendieron los documentos bajo la promesa de que con estos podrían ingresar a Costa Rica. Al parecer, estos migrantes no solo son víctimas de estafa, sino que también cometen un delito en territorio nacional.
El Ministerio de Seguridad Pública “hace un llamado a la ciudadanía nicaragüense para que se abstenga de adquirir tales documentos, ya que de ser detectados van a tener problemas con la Justicia costarricense”.
Los oficiales fronterizos de nuestro país reciben capacitaciones por el Departamento de Aduanas de los Estados Unidos, con el objetivo de afinar su capacidad de detección de documentos falsos.